Una de las principales recomendaciones para mantener una buena calidad de vida es realizar ejercicio con regularidad. Si bien suele ser complicado comenzar y mantener este hábito, debes saber que la actividad física reduce el riesgo de infartos, hipertensión, colesterol alto, sobrepeso y diabetes.

Pero los beneficios no terminan ahí, puedes lucir y sentirte mejor, ganar fuerza y flexibilidad, tener más energía y reducir el estrés.

¿Cómo comenzar y volverlo un hábito?

  1. Haz que tu familia participe. Es ideal tener su apoyo, sin olvidar que les inculcarás un importante hábito de salud.
  2. Únete a un grupo de ejercicios, club de salud o centro comunitario.
  3. Elige una actividad que sea de tu agrado y asegúrate de que sea conveniente para ti. Si dependes del clima, ten un plan B para los días de mal tiempo.
  4. Aprende un deporte nuevo que te resulte atractivo o toma clases para mejorar el que ya conoces.
  5. Convierte la actividad física en rutina para que se vuelva un hábito. Si dejas de practicar durante un tiempo, no pierdas las esperanzas, vuelve a empezar lentamente.

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Recomendaciones

No te compares con otras personas, el objetivo debe ser mejorar tu salud y aptitud física personal. De igual forma, piensa si te gustaría entrenar solo o con otras personas, en interiores o en exteriores, qué hora del día es mejor y qué tipo de ejercicio te gusta hacer.

Si sientes deseos de dejarlo, recuerda las razones por las cuales empezaste, así como lo lejos que has llegado. Finalmente, y no menos importante, no te exijas demasiado. Toma este cambio como un proceso y llegarás lejos.

 

Vía: AHA