El ritmo de vida actual, la exigencia laboral, el exceso de compromisos e incluso la elevada presencia de tránsito vehicular -sobre todo en grandes ciudades- han ocasionado que los hábitos alimenticios se vean severamente afectados. Y no sólo los de los adultos, sino también los de los niños, quienes cada vez es más común que consuman comida a domicilio.

Debido a que gran parte de este tipo de comida contiene elevados aportes calóricos, además de considerables porcentajes de grasa y su sabor suele resultar irresistible para los pequeños, estos podrían estar comprometiendo su salud a futuro, indicó una reciente investigación.

La comida a domicilio (especialmente la comida rápida) puede llegar a ser muy conveniente para el ritmo de vida actual, sin embargo, como una dieta constante, estos alimentos podrían aumentar el riesgo de que los niños desarrollen alguna enfermedad cardíaca o diabetes en un futuro, indicó el estudio.

Durante la investigación, que fue publicada en la edición online de la revista especializada Archives of Disease in Childhood, se encontró que los niños menores de 10 años que regularmente consumieron comida para llevar (al menos un día a la semana) presentaron índices más altos de grasa corporal y colesterol en la sangre, en comparación con aquellos que rara vez o nunca consumían esta clase de alimentos.

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“Estos resultados sugieren que los niños que tienen un consumo frecuente de comida para llevar probablemente tengan consecuencias adversas para la salud pública en un futuro, [por lo que esta costumbre] se debe desalentar activamente”, indicó Angela Donin, líder del estudio e investigadora de la Universidad de St. George, en Londres, Inglaterra.

Los investigadores también hallaron que los niños que más comida para llevar consumían, eran más propensos a consumir demasiadas calorías y menos vitaminas y minerales.

De acuerdo con los investigadores, los niveles altos de colesterol observados en los consumidores frecuentes de comida para llevar, de mantenerse de forma constante, son lo suficientemente grandes como para aumentar el riesgo de enfermedad cardíaca a largo plazo.

Si acostumbras ordenar esta clase de comida para alimentar a tus hijos, trata de evitarlo, pues aunque pueda sacarte de un apuro podría estar comprometiendo la salud de tus pequeños a futuro.

Vía: Health Library/Salud Limpia