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lactancia-materna-wicLa Escuela de Salud Pública de la Universidad de Yale esta utilizando un nuevo enfoque para incentivar a las madres para que, en lugar de utilizar fórmula láctea para sus hijos, los alimenten utilizando lactancia materna. Es bien sabido que la lactancia materna provee a los recién nacidos de los nutrientes vitales para que tengan un inicio de vida sano. Sin embargo, muchas madres pasan esto por alto.

Por ello, un equipo de investigadores de la institución utilizarán una herramienta novedosa para promocionar la lactancia materna: los mensajes de texto. El estudio fue bautizado como LATCH (siglas en inglés para Aviso de Lactancia a través de Texto Puede Ayudar). El objetivo es probar que los mensajes de dos vías pueden proveer a tiempo el estímulo que algunas nuevas madres necesitan para amamantar, así como darles recursos externos cuando se requiere y asistencia directa. La intervención LATCH es el primer asesoramiento directo en utilizar los mensajes de texto.

Dirigido por el profesor Rafael Pérez-Escamilla, director de la Oficina de Práctica de Salud Pública en la Escuela de Salud Pública de Yale, y Nurtit Harari, ex académica clínica en el Programa Robert Wood Johnson en Yale, el estudio reclutó a 250 nuevas madres en varias áreas del estado de Connecticut, Estados Unidos, que se encontraban inscritas en el Programa Nutrición Suplementaria de Mujeres, Infantes y Niños (WIC, por sus siglas en inglés).

El profesor Pérez-Escamilla señala la tasa de lactancia materna dentro de este programa esta muy por debajo del promedio que existe entre otras mujeres de los Estados Unidos. Los Estudios han mostrado que la lactancia materna proporciona un amplia gama de beneficios a la salud de los niños, incluyendo una mejor resistencia a las enfermedades y un mejor desarrollo intelectual durante la vida. También hay una serie de beneficios para la salud de las madres que amamantan, ya que son capaces de perder con mayor facilidad el peso que durante el embarazo ganaron, disminuyen el riesgo de enfermedad cardiovascular y de cáncer de mama y de ovario.

“Existe una necesidad de alcanzar una mejoría en el apoyo a madres de bajo ingreso. Hemos aprendido que muchas madres prefieren comunicarse vía texto. Se ha convertido en un medio más confiable para comunicarse de manera consistente con las madres nuevas” explica Harari.

Este programa ofrecerá educación y apoyo sobre la lactancia materna a través de un calendario automatizado de mensajes de texto y buscará mejorar la comunicación entre las madres inscritas en el programa WIC y los consejeros sobre el tema (antes, durante y después del embarazo). El programa también permitirá mantener un registro de todas las comunicaciones vía texto. Bajo la dirección de Harari y la asesoría de Pérez-Escamilla, LATCH fue probado el año pasado con un pequeño grupo piloto. Si este estudio de mayores dimensiones que actualmente se realiza resulta exitoso, este enfoque de bajo costo podría expandirse a un nivel más amplio.

“Al promover alianzas de investigación entre instituciones académicas y agencias del programa WIC, esperamos identificar acercamientos de costo neutral para mejorar el impacto de la educación en nutrición del WIC”, comenta Karen Cullen, profesora de Pediatría en Baylor y directora del Centro para la Investigación Colaborativa en Innovación en Educación Nutricional del WIC, institución que ha financiado el estudio.

Vía: Escuela de Salud Pública de Yale