Aproximadamente el 80 por ciento de los bultos de mama a los que se les hace una biopsia resultan benignos (no cancerosos), así lo indica el Centro de Cáncer Stony Brook, en Estados Unidos.
Por ello, el centro nos menciona las condiciones o afecciones de seno más comunes que producen bultos de mama:
Cambios fibroquísticos
Es la afección mamaria benigna más común, que da lugar a la formación de pequeños sacos llenos de líquido, comúnmente denominados quistes. El tamaño y la sensibilidad del bulto o bultos suele aumentar días antes de la menstruación.
Fibroadenomas
Otro tipo de bulto mamario. Son tumores benignos que suelen desarrollarse en la mayoría de las mujeres menores de 25 años.
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Papilomas
Un tercer tipo de bulto de mama. Estos son pequeños bultos parecidos a verrugas que crecen cerca del pezón. Generalmente producen una secreción clara o con sangre en el pezón.
RECUERDA: La mayoría de los bultos de mama son quistes o tumores benignos no cancerosos. Aunque pueden requerir la extirpación quirúrgica para evitar que interfieran con la función mamaria normal, no invadirán el tejido circundante; y no son potencialmente mortales.
Tu médico te indicará cuál es el mejor tratamiento para controlarlos o eliminarlos, en caso de ser necesario.
No obstante, existe la posibilidad de que los bultos sean tumores mamarios malignos (cáncer de mama), los cuales deben ser detectados y tratados a tiempo, pues de lo contrario continuarán creciendo, invadiendo y destruyendo el tejido normal adyacente. Si dicho proceso no se controla, los tumores se extenderán a los ganglios linfáticos circundantes, lo que a su vez puede derivar en metástasis (cáncer se extiende a otras partes del cuerpo), de ahí la importancia de la autoexploración y de acudir con el médico a la brevedad una vez que se detecten los bultos.
