El cuidado que tengas con tus lentes de contacto te ayudará a reducir el riesgo de contraer una infección ocular; de hecho, si no proteges tus ojos adecuadamente, podrías tener serios problemas.
Antes que nada, recuerda que es importante que vayas al menos una vez al año con el especialista para que te revise.
De igual forma, si presentas enrojecimiento, secreción visión borrosa, lagrimeo o un aumento de la sensibilidad a la luz, debes ir con el médico inmediatamente luego de retirarte el lente.
Utiliza únicamente solución especial para lentes de contacto para guardarlos o enjuagarlos. Asimismo, es importante que no uses estas sustancias si han estado abiertas más del tiempo recomendado.
Siempre sigue las instrucciones del doctor sobre como usarlos y limpiarlos.
Lava tus manos antes de tocar tus lentes.
Coloca los lentes antes de maquillarte y quítalos antes de limpiar tu rostro.
Evita utilizar los lentes decorativos que por lo regular se venden en tiendas de disfraces, pues pueden causarte daño en los ojos.
Quítalos cuando nades o te metas a un jacuzzi, pues podrías arriesgarte a tener una infección debido a que el agua no es estéril.
Vía: HealthDay News, Food and Drug Administration
