Los celos pueden llegar a ser comprendidos como un comportamiento por instinto del ser humano, sin embargo, en algunos casos, se trata de trastornos obsesivos compulsivos, subrayó un especialista.
Los celos son un mecanismo natural del ser humano, pero lo complejo de la sociedad moderna y su cercanía con el proceso de acumulación ha reforzado también la idea de los derechos de pertenencia, incluso sobre la pareja, destacó Óscar Galicia Castillo, psicólogo de la Universidad Iberoamericana.
Los celos “no están relacionados con la inseguridad de quien los padece, como suele creerse”, expuso Óscar, pues “no necesariamente proteges lo que amas, sino lo que crees que te pertenece”, señaló.
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Los celos, conocidos por los especialistas como celotipia, obedecen a la manifestación de un trastorno obsesivo compulsivo que puede tener un origen depresivo, de ansiedad o de personalidad paranoide, y están más relacionados con la agresión que con el amor, explicó.
De acuerdo con el especialista, existen relaciones en las que no es el amor lo que domina, sino la necesidad de proteger lo que se piensa forma parte de nuestro patrimonio. Los celos son una de las emociones básicas que se ha vuelto compleja desde que “nuestro cerebro creció”, enfatizó.
Asimismo, detalló que en el caso de los celos patológicos, la persona pasa su tiempo pensando en las amenazas e investiga, aunque la mayoría de las veces eso solo pasa en su mente. Finalmente, explicó que la celotipia patológica fomenta una relación destructiva, la cual termina con el mucho o poco amor que puede existir en una pareja.
Vía: Notimex
