De la vista nace el amor, dice el conocido refrán. En materia de alimentación, este dicho resulta igual de cierto que en otros campos. Una investigación realizada por Brian Wansinky Adrew S. Hanks, de la escuela y el departamento de Economía Aplicada y Administración de la Universidad de Cornell, señala que colocar los alimentos más sanos en el inicio de una mesa de buffet puede ayudar a los comensales a pasar de largo la comida menos sana.
Cuando los alimentos sanos son vistos primero, es más probable que sean elegidos y que los de más alto contenido calórico sean dejados de lado por la gente, señalan los investigadores. “Cada alimento que se escoge puede, en parte, determinar qué otro alimento selecciona una persona”, explicaron, esto quiere decir que “de esta manera, el primer alimento que una persona toma dispara lo que elige a continuación”.
El estudio, publicado en la revista PLoS One, consistió en que se ofrecieron dos desayuno buffet a 124 personas. En el primero, los participantes encontraron primero los alimentos saludables, como la fruta, el yogur bajo en grasa y la granola. En el segundo buffet los alimentos con mayor contenido calórico, como los huevos con queso, papas fritas y tocino fueron colocados en el inicio.
Los resultados revelaron que cuando los alimentos saludables eran ofrecidos primero, el 86 por ciento de los comensales seleccionaron fruta; pero cuando los menos saludables fueron vistos primero, solamente un 54 por ciento tomó fruta. De igual manera, cuando estos alimentos con muchas calorías estaban al frente del buffet, el 75 por ciento de los participantes escogió huevos con queso, comparado con un 29 por ciento que los comió con el “buffet saludable”.
“Los primeros tres alimentos que la persona encontró en el buffet completaron el 66 por ciento del total de su plato, sin importar si se trataban de alimentos de alto o bajo contenido calórico”, señala Brian Wansink. El orden de la comida en el buffet jugó un papel en lo que los participantes escogían, lo que los investigadores llamaron un “efecto disparador”.
Una recomendación que podemos obtener fácilmente de esto es que siempre empezemos por el lado más sano del buffet. Esto, señala Wansink, pude hacer que “dos terceras partes de sus platos contengan cosas buenas”.
Vía: PLoS One
