Hacer ejercicio es esencial para mantener un cuerpo saludable. Sin embargo, exponerlo a un arduo entrenamiento podría ser contraproducente si no se cubre la energía que se gasta. De acuerdo con expertos, la mejor forma de hacerlo es a través de la alimentación.
En este sentido, no se trata simplemente de activarse físicamente, sino de establecer hábitos saludables que estimulen el bienestar del organismo. Para lograrlo, debes comenzar por la dieta. ¿Sabías que es importante comer antes y después de ejercitarte? Expertos de Family Doctor te ofrecen algunos consejos.
Antes de hacer ejercicio
Lo ideal es ingerir tus alimentos un par de horas antes de hacer ejercicio. Tu comida o bocadillo debe incluir un carbohidrato complejo y una proteína. Por ejemplo:
Bocadillos
- Avena con arándanos.
- Rodajas de manzana con yogur.
- Requesón y fresas.
- Nueces y atún.
- Batido de proteínas con frutas mezcladas.
Comidas
- Quinoa con frijoles.
- Sopa de vegetales y frijoles.
- Salmón y arroz integral.
- Pechuga de pollo al horno y brócoli al vapor.
- Huevos revueltos con pan integral tostado.
- Pasta de harina integral cubierta con camarones.
Sin importar la hora de tu entrenamiento, es esencial tomar un pequeño bocadillo con anterioridad. Si llevas prisa, consume una fruta o un carbohidrato fácil de digerir. Esto te dará energía y evitará que te sientas lento o cansado.
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Después de hacer ejercicio
Alimentarte después de la actividad física puede acelerar la recuperación. Luego de hacer ejercicio, es necesario reponer los carbohidratos y la proteína para la reparación muscular. Por ejemplo:
- Leche chocolatada.
- Huevo duro en tostadas de pan integral.
- Hummus y zanahorias.
- Apio y mantequilla de maní.
- Galletas con queso y manzana.
- Medio sándwich —jamón de pavo en pan integral—.
Vía: Family Doctor
