Comenzar un programa de actividad física y mantenerlo es simple: convierte la actividad física en parte de tus costumbres diarias, lleva un registro de tus logros y consulta a tu médico si tienes una enfermedad crónica.
- Convierte la actividad física en parte de tus costumbres diarias.
Si no has realizado actividades físicas por un tiempo, comienza lentamente y aumenta el grado de actividad. A muchas personas les gusta comenzar caminando, y poco a poco aumentan el tiempo y la distancia.También puedes tomar otras medidas, como las que se describen a continuación.
- Personaliza los beneficios.
- Realiza actividades físicas con amigos y familiares.
- Aumenta la intensidad de las actividades cotidianas.
- Regálate tiempo para realizar actividades físicas.
- Lleva un registro de tus logros.
Piensa en la posibilidad de llevar un registro de actividades. El registro te serviría para estar al tanto de tus logros. A muchas personas les gusta llevar un podómetro para ver cuánto caminan cada día. Estas herramientas pueden ayudarte a fijar metas y a permanecer motivado.
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- Consulta a tu médico si padeces enfermedades crónicas.
Las personas sanas que no tienen problemas del corazón tal vez no tengan que consultar a un médico antes de iniciar actividades físicas de intensidad moderada. Si tienes una enfermedad crónica, como enfermedad coronaria, diabetes o presión arterial alta, pregunta a tu médico qué tipos de actividad física puedes realizar sin peligro.
¡No olvides los beneficios!
Algunos beneficios de la actividad física ocurren inmediatamente después de una sesión de actividad física moderada o intensa. Estos beneficios incluyen una mejor habilidad para pensar y menos sentimientos de ansiedad.
Hacer actividad física regularmente puede ayudarte a mantener fuertes tus habilidades para pensar, aprender y tener buen juicio con el pasar de los años. También puede reducir tu riesgo de depresión, así como ayudarte a dormir mejor.
¡Actívate todos los días y cuida tu cuerpo!
Fuente: Instituto Nacional del Corazón, los Pulmones y la Sangre (NHLBI, por sus siglas en inglés)