La motivación es clave cuando se trata de mantener una rutina de ejercicio diaria. Descubre algunos consejos para mantenerte activo.
- Establece metas alcanzables. Define metas realistas y alcanzables para ti mismo. Pueden ser metas a corto plazo, como caminar una cierta distancia cada día durante una semana, o metas a largo plazo, como correr una maratón en seis meses. Mantén un registro de tus progresos y celebra cada logro, por pequeño que sea.
- Encuentra un compañero de ejercicio. Hacer ejercicio con un amigo o un ser querido puede hacer que sea más divertido y motivador. Pueden animarse mutuamente, compartir experiencias y mantenerse responsables el uno al otro. Además, tener un compañero de ejercicio puede hacer que sea más difícil faltar a una sesión de entrenamiento cuando sabes que alguien más está contando contigo.
- Varía tu rutina. La monotonía puede matar la motivación, así que asegúrate de cambiar tu rutina de ejercicio de vez en cuando. Prueba diferentes actividades, ejercicios y lugares para mantener las cosas interesantes y desafiantes. Esto también ayuda a evitar el estancamiento y a trabajar diferentes grupos musculares.
- Celebra tus logros. Reconoce y celebra tus logros en el camino. Ya sea que hayas alcanzado una nueva marca personal, completado una rutina de ejercicio difícil o simplemente te hayas levantado de la cama para hacer ejercicio cuando no tenías ganas, tómate el tiempo para felicitarte a ti mismo y sentirte orgulloso de lo que has logrado.
- Visualiza tus objetivos. Imagina cómo te sentirás y cómo lucirás una vez que alcances tus objetivos de ejercicio. Visualizarte a ti mismo en forma, saludable y lleno de energía puede ser una poderosa fuente de motivación. Usa imágenes mentales positivas para mantenerte enfocado en tus objetivos y recordarte por qué estás haciendo ejercicio en primer lugar.
- Sé flexible y compasivo contigo mismo. No todos los días serán perfectos, y está bien. Si te saltas un entrenamiento o no alcanzas tus expectativas, no te castigues. Sé compasivo contigo mismo y recuerda que el progreso es un proceso continuo. Aprende de tus experiencias, ajusta tu enfoque si es necesario y sigue adelante con determinación y perseverancia.
Conoce más: ¿Cuánto ejercicio debo hacer al día para perder peso?
Con la combinación adecuada de motivación, variedad, apoyo social y autocompasión, puedes mantenerte en el camino hacia una vida más saludable y activa. Recuerda que el ejercicio no tiene que ser una tarea aburrida o una carga, sino una oportunidad para cuidar tu cuerpo y tu mente mientras te diviertes y te desafías a ti mismo.
Encuentra lo que funciona mejor para ti, establece metas alcanzables y recuerda que cada paso que das te acerca más a una versión más saludable y feliz de ti mismo.
¡No te rindas y sigue adelante hacia tus objetivos de bienestar y felicidad!
Fuente: Biblioteca Nacional de Medicina de los Estados Unidos