El entrenamiento de resistencia (también llamado entrenamiento de fuerza o entrenamiento con pesas) consiste en usar peso o resistencia para provocar la contracción muscular y, de esa forma, incrementar la fuerza, la resistencia anaeróbica y el tamaño de los músculos esqueléticos, así lo indica el Departamento de Salud del Gobierno del Estado de Victoria, en Australia.
El entrenamiento de resistencia se basa en el principio de que los músculos del cuerpo trabajarán para vencer una fuerza de resistencia cuando sea necesario. Cuando practicas este entrenamiento de manera repetida y constante, tus músculos se vuelven más fuertes.
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Por ello, a continuación te mencionamos los beneficios para la salud física y mental que pueden obtenerse a través del entrenamiento de resistencia:
- Fortalecimiento y tono muscular mejorados: para proteger tus articulaciones de lesiones.
- Mantiene la flexibilidad y el equilibrio, lo que puede ayudar a mantenerte independiente a medida que envejeces.
- Control de peso y aumento de la relación músculo-grasa: a medida que ganas músculo, tu cuerpo quema más energía cuando estás en reposo.
- Ayuda a reducir o prevenir el deterioro cognitivo en personas mayores.
- Mayor resistencia: a medida que te fortaleces, no te cansarás tan fácilmente.
- Prevención o control de afecciones crónicas como diabetes, enfermedades cardíacas, artritis, dolor de espalda, depresión y obesidad.
- Mejor manejo del dolor.
- Mejora de la movilidad y el equilibrio.
- Postura mejorada.
- Disminución del riesgo de lesiones.
- Mayor densidad y fuerza ósea y menor riesgo de osteoporosis.
- Mejor sensación de bienestar: el entrenamiento de resistencia puede aumentar la confianza en ti mismo, así como mejorar tu imagen corporal y tu estado de ánimo.
- Mejora del sueño y prevención del insomnio.
- Aumento de la autoestima.
- Rendimiento mejorado de las tareas diarias.
Fuente: Better Health Channel – Department of Health, State Government of Victoria, Australia
