La sepsis es una respuesta inmunitaria potencialmente mortal a una infección que ha entrado en el torrente sanguíneo. Identificarla a la brevedad y tratarla rápidamente son clave para sobrevivir a la sepsis.

Los signos y síntomas de la sepsis temprana también pueden presentarse en otras afecciones e infecciones, lo que dificulta su identificación durante las primeras etapas. Es importante llamar a tu profesional de la salud si tienes una infección que no mejora con el tratamiento o si presentas fiebre u otros síntomas repentinos, ya que la sepsis puede progresar y volverse muy peligrosa con gran rapidez.

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Según los expertos, los primeros síntomas en adultos se pueden recordar con el acrónimo TIME:

  • Temperatura (ya sea más alta o más baja de lo normal)
  • Infección (especialmente una infección bacteriana que no se trata y se propaga)
  • Deterioro Mental (es decir, cambios repentinos, confusión, somnolencia)
  • Extremadamente enfermo[a] (dificultad para respirar, dolor intenso o malestar)

Cuando tienes una infección, puede ser difícil saber si estás empezando a sentirte peor. Generalmente, las personas que desarrollan sepsis comienzan a sentirse más cansadas o confundidas, y pueden presentar temblores o escalofríos.

Otras personas podrían no saber que tienen una infección, pero deben prestar atención a los síntomas si han estado expuestas a alguien enfermo o si se han sometido recientemente a una cirugía, un procedimiento médico invasivo o una herida que abra la piel.

 

Fuente: Very Well Health