Una angiografía (o angiograma) por resonancia magnética (ARM) es un tipo de exploración de imágenes por resonancia magnética que utiliza un campo magnético y pulsos de energía de ondas de radio para otorgar imágenes de los vasos sanguíneos al interior del cuerpo. En muchos casos, la ARM puede brindar información que no se puede obtener de una radiografía, una ecografía o una tomografía computarizada (TC).

La ARM permite encontrar problemas con los vasos sanguíneos que pueden estar causando una reducción en el flujo de sangre. Con el angiograma por resonancia magnética, se puede ver tanto el flujo sanguíneo como el estado de las paredes de los vasos sanguíneos. Generalmente, la prueba se usa para observar los vasos sanguíneos que van hacia el cerebro, los riñones y las piernas. La información de una ARM se puede guardar y almacenar en una computadora para su estudio adicional. Asimismo, se pueden realizar fotografías de vistas seleccionadas.

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Cuando se realiza una ARM, el área del cuerpo que se está estudiando se coloca dentro de una máquina de resonancia magnética. Durante este tipo de angiograma, suele utilizarse material de contraste para hacer que los vasos sanguíneos se vean más claramente.

En concreto, un angiograma por resonancia magnética se utiliza para buscar:

  • Una protuberancia (aneurisma), un coágulo o la acumulación de depósitos de grasa y calcio (estenosis causada por placa) en los vasos sanguíneos que van al cerebro.
  • Un aneurisma o desgarro (disección) en la aorta, que transporta sangre desde el corazón al resto del cuerpo.
  • Estrechamiento (estenosis) de los vasos sanguíneos que van al corazón, pulmones, riñones o piernas.

Si deseas saber más sobre esta prueba o crees necesitar una, consulta a tu médico.

 

Fuente: Michigan Medicine – University of Michigan Health