Los vientos fuertes pueden ocurrir durante una tormenta eléctrica, un huracán u otro sistema climático fuerte.
Por ello, el Servicio Meteorológico Nacional de Estados Unidos sugiere cómo prepararse para hacerle frente a los vientos fuertes:
- Poda las ramas de árboles lejos de tu hogar y corta las líneas eléctricas.
- Asegura las canaletas y persianas sueltas.
- Identifica una habitación interior, como un sótano o baño, a la que puedas ir para resguardarte.
- Si vives en una casa móvil, busca un edificio sólido que se encuentre en los alrededores.
- Actualiza tu kit de emergencia e incluye suficiente comida y agua para tres días.
- Haz una lista de artículos fuera de tu hogar que necesites amarrar o almacenar.
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Si bien los vientos fuertes se asocian comúnmente con tormentas eléctricas severas y huracanes, también pueden ocurrir como resultado de las diferencias en la presión del aire, como cuando un frente frío atraviesa el área. Las grandes tormentas de invierno ocasionalmente producen vientos fuertes sobre el centro de diversas ciudades. Marzo y abril son los meses más probables para este fenómeno. Se emite una alerta de vientos fuertes cuando se esperan vientos sostenidos de 40 mph o más (más de 60 km/h) o ráfagas de hasta 58 mph o más (más de 90 km/h).
Este tipo de vientos pueden provocar la caída de árboles y líneas eléctricas, hacer volar escombros por los aires y colapsar edificios, lo que puede ocasionar cortes de energía, interrupciones en el transporte, daños a edificios y vehículos, lesiones, e incluso la muerte.
Por lo anterior, toma estas precauciones y cuida tu seguridad y la de los tuyos.
