Lavarse las manos es una de las mejores formas de prevenir la propagación del COVID-19 y otros virus, pero para las personas con afecciones de la piel como el eccema, la formación de espuma a menudo puede provocar sequedad, agrietamiento, picazón, dolor e incluso una infección.

Conoce más: Remdesivir, ¿qué beneficio aporta a los casos moderados de COVID-19?

Si estás luchando por equilibrar el lavado de manos pandémico y las afecciones de la piel, el doctor Jonathan Silverberg, dermatólogo de la Facultad de Medicina de la Universidad George Washington en Washington, D.C., ofrece los siguientes consejos:

  1. El lavado regular es mejor que el desinfectante de manos: cuando te limpias con agua y jabón, y luego te aplicas inmediatamente una crema hidratante, puedes «compensar gran parte de los efectos secantes del lavado de manos», asegura Silverberg, quien recomienda llevar un tubo de bolsillo de crema humectante para que puedas aplicarlo sobre la marcha.
  2. Evita los jabones antisépticos y antibacterianos: quizás no los necesites, siempre que te frotes a fondo con cualquier jabón durante al menos 20 segundos y luego te enjuagues.
  3. Hidrátate adecuadamente: después de lavarte, date golpecitos en las manos hasta que estén casi secas, utilizando una toalla de papel o un pañuelo de papel. «Una vez que estés mayormente seco(a), [es decir, tu piel todavía está un poco húmeda], aplica una cantidad generosa de humectante para cubrir toda la superficie de tus manos y dedos», dijo Silverberg.
  4. Ten cuidado con los guantes y el desinfectante: para evitar la irritación por el lavado de manos, algunas personas con afecciones cutáneas usan guantes desechables y luego usan desinfectante, un enfoque que Silverberg no recomienda. «Cuando aplicamos desinfectante de manos sobre nuestra piel desnuda, podemos sentir si cubrimos toda la superficie de las manos y los dedos. Pero cuando usamos guantes, limitamos la capacidad de sentir esto y podríamos perder algunos puntos en los guantes, y luego portar accidentalmente algunos gérmenes», explicó Silverberg. Tiene más sentido cambiarse los guantes y/o lavarse o desinfectarse las manos con frecuencia, agregó.
  5. Usa guantes al limpiar: los productos de limpieza son especialmente fuertes para la piel. «La gente siempre debe usar guantes cuando usa toallitas antisépticas y productos de limpieza», dijo Silverberg.
  6. Esteriliza los recipientes: si llevas botellas de jabón y humectante, limpia y esteriliza los recipientes para eliminar los gérmenes dañinos. Y recuerda: No debes aplicar humectante a menos que las manos estén limpias, para evitar contaminar el producto.

 

Vía: Health Day News