Sumado a la pandemia de COVID-19 que actualmente vivimos, hemos entrado a la primavera, época en la que se presenta mucho la famosa sinusitis (también llamada rinosinusitis), que es cuando el sistema de drenaje de nuestras fosas nasales se bloquea, generalmente por inflamación debido a una infección (incluida la del nuevo coronavirus) o una alergia.
Ante ello, una de las formas más simples, económicas y efectivas para prevenir y tratar los problemas de los senos nasales durante el aislamiento es la irrigación nasal. Con una solución casera, a menudo puedes aliviar los síntomas de la sinusitis, reducir la dependencia de aerosoles nasales y antibióticos, y mejorar tu calidad de vida.
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Para lograrlo, debes seguir estos pasos al menos una vez al día:
- Agrega ½ cucharadita de sal no yodada y ½ cucharadita de bicarbonato de sodio en 2 tazas de agua tibia destilada o previamente hervida(según lo recomendado por la Academia Estadounidense de Otorrinolaringología).
- Llena una jeringa de bulbo pequeño con la solución de agua salada. (Si lo prefieres, puedes usar una pequeña jarra llamada olla Neti para transmitir la solución por la nariz).
- Inclínate sobre el lavabo de tu baño o cocina, inserta la punta de la jeringa dentro de una de las fosas nasales y aprieta suavemente la bombilla. El agua saldrá por la fosa nasal (o posiblemente por la fosa nasal opuesta) y entrará en el fregadero. Usa al menos un bulbo lleno de solución.
- Repite el procedimiento en la otra fosa nasal. (Si la solución de sal hace que te pique la nariz, usa menos sal).
- Enjuaga bien (con agua hervida destilada o fría) y seca la jeringa de bulbo o la olla Neti después de cada uso.