Los que conocemos como vejiga es un órgano hueco ubicado en la parte inferior del abdomen. Tiene como principal función almacenar la orina producida por los riñones antes de ser expulsada al exterior a través de la uretra.

Cuando el sistema urinario se encuentra saludable, la vejiga fácilmente puede retener hasta 473 mililitros (equivalente a 2 tazas) de orina de 2 a 5 horas.

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Sin embargo, hay varias afecciones que pueden impedir el correcto funcionamiento de la vejiga. Entre las enfermedades más comunes que afectan a este órgano se encuentran:

1. Cistitis

Es el término médico para referirse a la inflamación de este órgano. La mayoría de las veces, esta inflamación suele ser causada por una infección bacteriana y recibe el nombre de infección urinaria.

2. Incontinencia urinaria

Es la pérdida del control de la vejiga. Los síntomas pueden variar desde una filtración de orina leve hasta la salida abundante e incontrolable de esta. Puede ocurrirle a cualquier persona, pero es más común en las personas de mayor edad. Datos indican que las mujeres tienen el doble de riesgo de experimentarla, en comparación con los hombres.

3. Vejiga hiperactiva

Se conoce de esta manera a los casos cuando se expulsa orina en el momento equivocado. Se puede decir que una persona lo padece si presenta los siguientes síntomas: orinar 8 o más veces al día o más de 2 veces a la noche, tener ganas repentinas de orinar y fuertes necesidades de orinar inmediatamente, pérdida de orina luego de haber tenido ganas repentinas de orinar.

4. Cistitis intersticial

Es una afección que causa molestias o dolor en la vejiga y una necesidad de orinar frecuente y urgentemente. Es mucho más común entre las mujeres que en los hombres. Los síntomas varían en cada persona, mientras algunas pueden sentir dolor sin ganas de orinar frecuentes, otras tienen la urgencia sin dolor.

5. Cáncer de vejiga

Es el sexto tipo más común de cáncer en Estados Unidos. Sus síntomas incluyen sangre en la orina, urgencia frecuente de orinar, dolor al orinar, dolor en la parte baja de la espalda.

Solamente un profesional de la salud puede diagnosticar una de las enfermedades de la vejiga, mediante distintas pruebas. Estas incluyen análisis de orina, radiografías y exámenes.

El tratamiento depende de la causa del problema. Puede incluir medicinas y, en casos severos, cirugía.

 

Vía: Medline Plus