La sepsis es una disfunción orgánica potencialmente mortal causada por una respuesta exagerada del cuerpo a una infección, así lo indica la Alianza Europea para la Sepsis.
La información actualmente disponible sobre los casos clínicos de COVID-19 señala que un pequeño porcentaje de infecciones por el nuevo coronavirus puede provocar sepsis.
Asimismo, sin un tratamiento temprano, la sepsis puede provocar daño en los tejidos, insuficiencia orgánica y muerte.
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Por ello y para protegerte de la sepsis durante la pandemia de COVID-19, los Centros para el Control y Prevención de Estados Unidos (CDC) recomiendan lo siguiente:
- Habla con tu médico sobre los pasos que puedes seguir para prevenir infecciones.
- Cuida y vigila bien las enfermedades crónicas (si padeces alguna) y acude a que te apliquen las vacunas recomendadas.
- Practica una buena higiene.
- Conoce los síntomas de sepsis, que pueden incluir:
- Escalofríos
- Confusión o delirio
- Fiebre o temperatura corporal baja (hipotermia)
- Mareo debido a presión arterial baja
- Latidos cardíacos rápidos
- Erupción o manchas en la piel
- Piel caliente
- Actúa rápidamente si sospechas tener sepsis, acudiendo a revisión médica a la brevedad o llamando a emergencias.
RECUERDA: Aunque se han documentado algunos casos, no existe como tal una “sepsis por coronavirus”, ya que esta puede desencadenarse por cualquier otro patógeno (virus o bacteria); de ahí la importancia de reforzar el cuidado de la salud y los hábitos saludables para prevenir cualquier tipo de infección que pudiera desencadenar una sepsis, ya sea en ti o en cualquier miembro de tu familia o ser querido.