La adolescencia es uno de los mejores momentos de la vida: los amigos, la libertad y el descubrimiento de sí mismos puede convertir a esta etapa en el momento ideal para forjar un buen camino. Sin embargo, también se trata de una transición con fuertes cambios emocionales y físicos.
Por esta razón, es importante:
- Fomentar su confianza y autoestima. Diles por qué estás asombrado u orgulloso de ellos. Hazles saber cuánto los valoras.
- Brindar apoyo emocional. Escúchalos y ayúdales a entender sus sentimientos.
- Proporcionar seguridad y protección. Mantén rutinas para que se sientan bien. Asegúrate de que sepan que el hogar es un lugar seguro para ellos.
- Enseñar resiliencia. Enséñale a tus hijos a superar los momentos difíciles. Ayúdalos a enfrentar el cambio, manejar el estrés y aprender de los problemas.
- Establecer expectativas y límites. Permite que tus hijos tengan su propio espacio. No olvides insistir en la honestidad, el autocontrol y el respeto por los demás en todo momento.
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Es esencial que evites los comentarios y las críticas negativas. Los adolescentes necesitan comentarios, pero responden mejor a los comentarios positivos.
Otras recomendaciones
Recuerda que los adolescentes pueden experimentar problemas al tratar de definirse a sí mismos. Pueden cambiar sus valores, ideas, peinados o ropa para poder hacer esto. Piensa que es un comportamiento completamente normal y no tienes de qué preocuparte.
Considera que un comportamiento inapropiado o destructivo puede ser señal de un problema. En estos casos, trabajen juntos para mantener una comunicación abierta. Si sospechas que existe un trastorno o problema serio, habla con tu hijo y pregúntale sobre aquello que le molesta. Pide ayuda si es necesario.
Vía: Family Doctor
