El proceso de digestión es fundamental para una adecuada salud integral. Se trata del momento en que nuestro sistema digestivo se encarga de obtener todos los beneficios de la comida que acabamos de consumir.

Una adecuada digestión de los alimentos lleva los nutrientes de forma más eficiente hacia el torrente sanguíneo, lo que favorece el proceso de absorción, indicó Marcos Calle Quispe, coordinador nacional de la Estrategia Sanitaria de Salud Bucal del Ministerio de Salud del Perú (Minsa).

No obstante, debido a los inadecuados hábitos alimenticios que imperan hoy en día, no son pocas las personas que presentan molestias al momento de que su organismo digiere los alimentos.

Síntomas como pesadez en el estómago, dolor abdominal, regurgitación (expulsar por la boca, sin vomitarlo, un alimento no digerido), agruras, náuseas, eructos, gases, sensación de estar lleno, entre otros, son signos de que no se está llevando a cabo una adecuada digestión.

Aunque estos síntomas pueden llegar a ser experimentados de forma regular, no son algo ordinario. Se deben a una dieta y hábitos inadecuados de alimentación, los cuales pueden afectar la salud a largo plazo.

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Si no se controlan las molestias puede haber lesiones. Además, no se absorben adecuadamente las vitaminas, proteínas y otros nutrientes, esto afecta la formación de células estomacales”, advirtió Eloy Pacho, médico internista de la Clínica de la Concepción de Madrid, en España.

Para evitar problemas durante la digestión, especialistas recomiendan los siguientes consejos:

1 Caminar después de comer.- Los problemas digestivos pueden disminuir si caminas entre 10 y 30 minutos después de la comida o cena. Este hábito ayuda a activar el metabolismo, facilitando la correcta asimilación de los alimentos.

2 Comer en horarios establecidos.- Comer todos los días a la misma hora es un hábito que ayudará a mejorar el proceso digestivo, ya que al tener el estómago vacío por varias horas, este secreta fluidos que provocan acidez e hinchazón.

3 Incluir alimentos saludables.- Agregar a la dieta diaria alimentos ricos en proteínas como pescado, pollo, pavo y leche descremada, ayuda a reforzar la válvula que protege el estómago.

4 Masticar despacio.- Existen estudios donde se demuestra que masticar despacio los alimentos (entre 30 y 50 veces por bocado) ayuda a tener una buena digestión.

 

Vía: Salud180