Un evento catastrófico, como el sismo del pasado 19 de septiembre, puede causar estrés postraumático y daños severos en la calidad de vida. Ante ello, la especialista Griselda Galván Sánchez ha recalcado la importancia de identificar ciertos síntomas que no suelen relacionarse con el trastorno, con el fin de recibir atención médica y psicológica. Estos son:

  1. Falta de apetito.
  2. Insomnio.
  3. Irritabilidad.

La experta en trastornos de la conducta alimentaria indicó que los habitantes de la Ciudad de México, así como de otros estados afectados, ya viven el estrés agudo, situación que debe prevenirse, principalmente en el caso de los niños.

¿Cómo prevenir o reducir el estrés?

Según la experta, es necesario iniciar a partir de la validación de los sentimientos y pensamientos. Las personas afectadas necesitan ser escuchadas cuando hablan del miedo que sintieron. Posteriormente, un especialista en salud mental —o alguna persona experta en el tema—, debe explicarles las medidas que tienen al alcance para protegerse.

El estrés agudo es una reacción que disminuye conforme las personas se adaptan a la situación. No obstante, de no tratarse adecuadamente, podría conducir a un trastorno de estrés postraumático, el cual requiere tratamiento y una intervención.

En este sentido, la atención médica para ayudar a validar los sentimientos de las personas afectadas sería el primer paso para disminuir la reacción que se tiene tras un evento de angustia y, en caso de ser necesario, un experto en salud mental puede ofrecer alternativas farmacológicas.

«Ahorita eso nos pasa a todos, oímos que alguien grita fuerte, alguien toca una bocina y juramos que es la alarma sísmica. La mayoría de la gente ha sentido que está parada y se empieza a mover y siente que está temblando, esas son reacciones de estrés», subrayó.

¿Conoces a una persona que necesite ayuda tras el sismo? Recuerda que puedes acudir a centros de salud públicos o privados y recibir apoyo de manera gratuita.

 

Vía: Notimex