3 maneras para escoger alimentos más sanos.3Una nueva investigación ha sugerido que para resultar vencedor en el juego de la dieta saludable, se debe tener lo que estos expertos denominan como una actitud «CAN«, la cual resulta de más ayuda que el solo depender de la voluntad o la educación.

Tras una revisión de más de 100 estudios, especialistas de la Universidad de Cornell, EU, hallaron tres cosas que ayudan a las personas a escoger alimentos más sanos: El alimento o comida debe ser conveniente (C), atractivo (A) y normal (N), o como dijimos en el párrafo anterior, CAN.

Los resultados publicados en la revista Psychology & Marketing, sugieren que el enfoque CAN es más efectivo que decirle a la gente lo que debe comer o pedirles que se resistan a consumir alimentostentadores”.

«El poder de la voluntad trabaja para algunos, pero solo en un 5 a 10 por ciento de la población”, comentó el autor líder del estudio Brian Wansik, quien es director de Marcas y Alimentos de Cornell. “Cerca del 95 por ciento de las dietas fallan”.

Típicamente, una persona llega a tomar hasta 200 decisiones relacionadas con la comida por día. Esto significa que la mayoría de las decisiones sobre alimentos son rápidas e instintivas.

De acuerdo con Wansik, la mayoría de la gente no tiene tiempo para sentarse a analizar lo que están comiendo o si han quedado o no satisfechos. En su lugar, la gente necesita reestructurar su entorno de manera que funcione para ellos.

El enfoque CAN lo logra ayudando a la persona a ser más exitosa al seleccionar opciones de alimentos más saludables.

Esto es lo que necesitamos para volver simple a la alimentación saludable y la opción por defecto, por lo que sería difícil comer de forma insana”, dijo Penny Kris-Etherton, profesora de nutrición en la Universidad Penn State, quien valida este innovador enfoque.

Pero, ¿cómo podemos poner los principios de CAN en práctica? Lo que primero que debemos hacer es escoger alimentos nutritivos convenientes. En casa, por ejemplo, Wansik sugiere colocar un tazón de fruta a una distancia de dos pies (aprox. 60 cm) de donde la gente camina cerca de éste. Y deben tenerse al menos dos opciones disponibles: manzanas y plátanos, por mencionar algunas.

Los investigadores también sugieren mantener el tazón de fruta cerca de las llaves del auto. De esta manera, podrás recordar agarrar una manzana u otra fruta mientras te diriges a la puerta. Con esto, tendrás una opción conveniente y saludable si te da hambre durante tu trayecto hacia otro lugar.

Adicional a esto, el tazón resulta una opción más atractiva comparada con tener la fruta al fondo del refrigerador, donde nadie la ve y, por tanto, a nadie le importa. Los investigadores dijeron que tornar atractivas a las opciones de alimentos podría tener que ver con cómo lucen dichas comidas. También podría referirse a algún otro factor. Por ejemplo, el precio podría hacer más atractivo a un alimento en particular.

Que las opciones saludables sean muy accesibles y siempre estén ahí también las hace más normales. Cuando un alimento se vuelve normal y accesible, podría potencialmente convertirse en una opción más popular. Cuando escoger una manzana sea conveniente y normal, la gente tendrá más inclinación a seleccionar dicha fruta en lugar de una galleta menos accesible.

Influenciar las conductas que son consideradas normales y populares es una manera rápida, fácil y productiva para cambiar el comportamiento de un consumidor.

El enfoque CAN ha sido muy exitoso en diversas escuelas de Estado Unidos. Wansink ha mostrado en estudios previos que simplemente al colocar la leche regular, en lugar de la leche con chocolate, al frente de la nevera (conveniente), en una botella llamativa (atractivo) y que abarque al menos la mitad del espacio en la nevera (normal) se incrementó el consumo regular de leche entre los estudiantes, pasando de 30 a 60 por ciento.

 

Vía: Health Library