El origen de la psoriasis es multifactorial, es decir, intervienen muchos factores en su desarrollo —genéticos, inmunológicos y ambientales—. Provoca enrojecimiento, descamación, dolor e hinchazón en la piel. Lamentablemente, también puede causar daño en las articulaciones, de acuerdo con el especialista Alfredo Arévalo López, miembro de la Academia Mexicana de Dermatología.

Si bien no es considerado un padecimiento incapacitante, es un hecho que disminuye la calidad de vida. Algunos factores comunes que conducen al padecimiento son:

  1. Alteraciones inmunológicas. Esto no significa que haya una baja de defensas, «tiene que ver con los cambios biológicos de las personas; una falla en el funcionamiento del organismo provoca una cadena de alteraciones que tienen que ver con una inflamación, que a su vez se relaciona con cambios a nivel molecular, lo que hace que se vayan formando las lesiones”, explicó.
  2. Heridas en la piel por rasguño o cortada. Es un ejemplo de traumatismo en la piel que conduce a la enfermedad. En este caso la herida no es la causa, pues sólo ocurre cuando el paciente ya tiene una predisposición.
  3. Estrés psicológico. La piel y el sistema nervioso están estrechamente ligados. El estrés psicológico hace que el cuerpo libere sustancias químicas —neurotransmisores— que afectan a varios órganos del cuerpo, incluida la piel. Son reacciones en cascada que llevan a menos impermeabilidad en la barrera de la piel, una ligera aceleración del ritmo de renovación cutánea y mayor riesgo de inflamación.

En México, hay más de un millón de pacientes con la enfermedad, desde niños hasta personas de la tercera edad, aunque se presenta con mayor frecuencia en personas de 20-30 años y 50-60 años.

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Aunque existe rechazo social a causa de las lesiones que provoca, la psoriasis no es contagiosa. Si detectas lesiones en tu piel, visita a un dermatólogo y busca la mejor opción de tratamiento.

 

Vía: Notimex