No existen una forma global de sustituir la mantequilla en lo que respecta a cocinar alimentos de diversas formas, pero sí es posible hallar algunas opciones que son mejores para tal fin y que, además, no contienen lácteos, pues muchas personas no los toleran, son alérgicas a ellos o simplemente desean preparar platillos más vegetarianos o veganos.

Por ello, aquí te dejamos algunas recomendaciones funcionales, cortesía del portal especializado en salud Very Well Fit:

1. Margarina sin lácteos

Úsala cuando tu receta requiera de mantequilla para saltear. Esta margarina también funcionará si tu receta necesita pequeñas cantidades de mantequilla, por ejemplo, una cucharada o dos en una sopa.

La margarina sin lácteos es un producto ampliamente disponible, especialmente en las tiendas naturistas y supermercados que venden una gran selección de alimentos «verdes», así como en establecimientos con grandes secciones de alimentos naturales.

Sin embargo, revisa la información nutrimental cuidadosamente, ya que la mayoría de la margarina incluye algunos lácteos. Además, debes cuidar las porciones, ya que las margarinas suelen tener grasas trans (grasa mala).

La margarina funciona mejor como condimento y en recetas que requieren específicamente margarina o que utilizan pequeñas cantidades de mantequilla.

2. Aceite

Usa aceite en lugar de mantequilla en recetas que impliquen freír alimentos.

Asimismo, procura utilizar el aceite adecuado para el trabajo. Esto dependerá, en parte, de la temperatura que usarás al saltear tus alimentos y de si incorporarás mantequilla para agregar sabor.

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Si vas a utilizar una gran cantidad de grasa a fuego alto, elige un aceite con un punto de humeo alto (la temperatura a la cual el aceite comienza a humear y arder). El aceite de oliva refinado (no el aceite de oliva extra virgen) y el aceite de coco tienen puntos de humeo altos.

Si decides utilizar aceite de coco, debes tener en cuenta que a pesar de ser aceite vegetal tiene un alto contenido en grasas saturadas (grasa mala) por lo que te recomendamos cuidar las porciones o preferir de oliva.

Por el contrario, si estás usando una temperatura un poco más baja para dorar el alimento y obtener una capa ligera para añadir sabor, considera aceites como el de oliva, sésamo o cacahuate.

3. Manteca y grasas vegetales

Aunque la manteca y otras grasas vegetales que son sólidas a temperatura ambiente suelen tener una mala reputación por ser altas en grasas saturadas, sí poseen dos virtudes culinarias principales que ninguna otra alternativa de mantequilla puede igualar:

  • Son las mejores cosas en el mercado para hacer productos horneados escamosos como galletas y pasteles.
  • Existen versiones que son seguras para las personas con alergias a los productos lácteos y a la soya, una ventaja sobre la margarina para quienes padecen esta difícil combinación de alergias. Tales opciones incluyen a la manteca de aceite de palma y al aceite de coco, que no contienen soya ni lácteos en su composición. El aceite de palma funciona bien en las costras, mientras que el aceite de coco permite preparar un delicioso glaseado.

Para preparar roux (mezcla de harina y manteca que funciona como base para salsas y sopas), puedes experimentar con margarinas veganas.

También puedes usar aceite vegetal líquido en lugar de mantequilla para hornear, especialmente en recetas donde la mantequilla debe derretirse de antemano.

RECUERDA: Si estás evitando la mantequilla porque sufres alergia a los productos lácteos, probablemente desees tener una amplia gama de estos sustitutos de mantequilla en casa. Cabe destacar que no todos los sustitutos de mantequilla funcionarán bien en todos los casos. Por ello, el consejo es que experimentes con ellos utilizando tus recetas favoritas, para determinar qué funciona mejor en cada receta.

 

Vía: Very Well Fit