Dependiendo de su calidad, las relaciones de pareja pueden ser un potenciador para la salud integral y la calidad de vida, o una amenaza para ambas.
Así como existen evidencias que respaldan el hecho de que tener una relación de pareja saludable favorece el bienestar y mejora la salud integral, también existen hallazgos que confirman cuánto mal pueden provocar a la salud las relaciones tóxicas.
Es por ello que las personas que se encuentran en búsqueda de una pareja no deben precipitarse. Pues querer acelerar las cosas no garantiza el éxito de una relación.
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El hecho de no pensar con calma con qué persona se iniciará una relación de pareja o, peor aún, precipitarse y forzar una relación puede traer consigo importantes problemas de salud, desde fuertes cargas de estrés y ansiedad, hasta casos serios de depresión.
Para evitar este escenario, expertos recomiendan llevar a cabo algunos sencillo consejos:
1. Saber qué es lo que queremos
Cuando una persona no sabe qué es lo que necesita en una relación ni cómo pedirlo, no importa los esfuerzos que haga, ya que esa falta de claridad frecuentemente llevará a una persona al desencanto y a una relación al desastre inminente, advirtió Stephen Snyder, terapeuta sexual estadounidense.
“Si no sabes lo que quieres, tu relación está en problemas desde el inicio”, aseguró el experto. Antes de iniciar una nueva relación define con claridad cuál es tu objetivo, aconsejó.
2. Ser fiel a nuestros límites
La mayoría de las relaciones que fracasan tienen un común denominador: uno de sus integrantes no definió sus límites desde un inicio. Cualquier relación será infinitamente más saludable si tuviera límites claros y constructivos para ambas partes, destacó Snyder.
El experto recomendó que lo mejor para las personas es contar con su respectivo espacio, tanto para realizar sus intereses como para nutrir sus relaciones sociales. Ya que está comprobado que gozar de fuertes vínculos sociales con personas fuera de la familia y pareja es sumamente benéfico para la salud mental.
3. ‘Abrirse’ sentimentalmente con calma
Es común que al principio de una relación las personas se sientan tentadas a hablar sin cesar de todo aquello que les pasa por la mente. “Este es un periodo de expansión intenso y por eso es lo más natural querer saberlo todo y decirlo todo”, compartió Ian Kerner, psicoterapeuta estadounidense.
De acuerdo con el experto, la clave es revelar partes de uno mismo y de nuestra historia en el transcurso del tiempo según vaya siendo relevante en un contexto determinado. Esperar a que fluya naturalmente.
Vía: The New York Times
