Graduarse de la preparatoria es un logro que incluye cierto estrés emocional tanto para ti como para tu hijo o hija.
Por ello, la Academia Americana de Pediatría te sugiere cómo puedes apoyar a tu hijo(a) cuando se gradúe:
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- Asegúrate de que tu hijo tenga cobertura médica después de la preparatoria y que sepa cómo usarla. Muchos planes de atención médica permiten que los adolescentes y adultos jóvenes estén cubiertos por el plan de sus padres hasta que cumplan los 26 años.
- Asegúrate de que tu hijo haya recibido todas las vacunas recomendadas.
- Si tu hijo adolescente tiene necesidades mentales o físicas especiales, ayúdalo a crear un plan para satisfacer esas necesidades.
- Si tu hijo(a) va a la universidad, habla con la escuela sobre cualquier adaptación especial que él (o ella) necesite.
- Mantén un contacto frecuente con tu hijo(a), especialmente durante el primer mes, cuando usualmente no ha hecho amigos de confianza.
- Si tu hijo(a) está comenzando un nuevo trabajo, dale más espacio, pero ofrécele orientación sobre cómo pagar las cuentas, administrar el cuidado de su salud y ahorrar dinero.
- Procura tener una comunicación abierta sobre el uso de drogas y alcohol.
- Habla abiertamente sobre la presión de los compañeros, las elecciones de estilo de vida y las decisiones sexuales.
- Cuando tu hijo cumpla los 18 años, ya no tendrás acceso legal a sus registros académicos y de atención médica. Por lo tanto, es importante que mantengas líneas claras de comunicación y transparencia.
- Toma en cuenta cualquier sensación persistente de tristeza o nostalgia que interfiera con la capacidad de tu hijo(a) para trabajar o asistir a clases.
Vía: Health Day News
