Para muchas personas, el uso de anteojos puede ayudar a proteger o corregir su visión. Los ejemplos de anteojos incluyen los siguientes:

  • Gafas de sol
  • Gafas protectoras
  • Anteojos (también llamados lentes)
  • Lentes de contacto

Si necesitas lentes correctivos, puedes elegir entre lentes de contacto o anteojos. Cualquiera de los dos generalmente requiere receta médica. Asimismo, casi cualquier persona puede usar anteojos. En el caso de las lentes de contacto, estas requieren un manejo más cuidadoso.

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Muchos trabajos y algunos deportes conllevan el riesgo de lesiones oculares, por lo que en tales casos, es indispensable el uso de gafas protectoras. Cabe mencionar que miles de niños y adultos sufren lesiones en los ojos cada año, pero la mayoría se pueden prevenir con la protección adecuada para los ojos.

Finalmente y no menos importante, todo el mundo corre el riesgo de sufrir daños en los ojos durante todo el año debido a la exposición al sol. Por tal motivo, es indispensable utilizar regularmente gafas de sol que bloqueen al menos el 99% de los rayos ultravioleta (UV).

Si tienes más dudas sobre el uso de anteojos, crees que debes usarlos o necesitas saber más sobre los diferentes tipos que existen y cuáles serían mejor para ti, consulta a un oftalmólogo. No olvides que debes realizarte un examen de la vista al menos cada año.

 

Fuente: U.S. National Library of Medicine