El invierno plantea muchos riesgos para las personas con psoriasis, que provoca manchas rojas y elevadas en la piel cubiertas de escamas plateadas o blancas. Los brotes pueden ser consecuencia de la sequedad de la piel por estar en un ambiente cálido en interiores o por tomar duchas largas y calientes.

Los virus del invierno (como los causantes de infecciones virales) o la faringitis estreptocócica también pueden desencadenar un brote de psoriasis, al igual que la menor exposición a la luz solar.  Según los expertos, la radiación UVB es en realidad un tratamiento para la psoriasis, ya que ralentiza el rápido crecimiento de la piel que la impulsa.

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Con base en la información anterior, aquí te dejamos algunas recomendaciones:

  • Toma duchas más cortas y tibias
  • Use un humidificador en casa
  • Hidrata la piel aplicando abundantemente emolientes a base crema, al menos una vez al día, justo después de ducharte, para mantener la piel bien hidratada y la barrera cutánea intacta durante los meses de invierno.
  • Trata de exponerte a la luz solar natural de 10 a 15 minutos cada día. Usa un protector solar de amplio espectro con un FPS de al menos 30, incluso si estás sentado(a) en un espacio cerrado junto a una ventana.

Fuente: Harvard Medical School