En la atención médica, suelen utilizarse varias pruebas bien establecidas para detectar la inflamación. Sin embargo, es importante considerar que estas pruebas no pueden distinguir entre la inflamación aguda, que puede desarrollarse con un resfriado, una neumonía o una lesión, y la inflamación crónica más dañina que se presenta con la diabetes, la obesidad o una enfermedad autoinmune, entre otras afecciones.
Conoce más: ¿Cómo reducir la inflamación en articulaciones con la dieta?
Con base en lo anterior, a continuación te mencionamos cuatro de las pruebas más comunes para la inflamación:
- Velocidad de sedimentación globular (VSG). Esta prueba mide la rapidez con la que los glóbulos rojos se depositan en el fondo de un tubo vertical de sangre. Cuando hay inflamación, los glóbulos rojos caen más rápido, ya que una mayor cantidad de proteínas en la sangre hace que esas células se aglomeren. Aunque los rangos varían según el laboratorio, un resultado normal suele ser de 20 mm/h o menos, mientras que un valor superior a 100 mm/h es bastante elevado.
- Proteína C reactiva (PCR). Esta proteína producida en el hígado tiende a aumentar cuando hay inflamación. Un valor normal es inferior a 3 mg/L. Un valor superior a 3 mg/L generalmente se utiliza para identificar un mayor riesgo de enfermedad cardiovascular, pero la inflamación corporal puede hacer que la PCR aumente a 100 mg/L o más.
- Ferritina. Se trata de una proteína sanguínea que refleja la cantidad de hierro almacenado en el cuerpo. Se suele solicitar para evaluar si una persona anémica padece deficiencia de hierro, en cuyo caso los niveles de ferritina son bajos. En contraste, si hay demasiado hierro en el cuerpo, los niveles de ferritina pueden ser elevados. Pero los niveles de ferritina también aumentan cuando existe inflamación. Los resultados normales varían según el laboratorio y tienden a ser un poco más altos en los hombres, pero un rango normal típico es de 20 a 200 mcg/L.
- Fibrinógeno. Aunque esta proteína se mide con mayor frecuencia para evaluar el estado del sistema de coagulación de la sangre, sus niveles tienden a aumentar cuando hay inflamación. Un nivel normal de fibrinógeno es de 200 a 400 mg/dL.
Fuente: Harvard Medical School