La comida ensucia, así que es normal que el espacio donde la guardas, preparas y desechas se cubra de residuos.
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El más importante de esos espacios es el refrigerador. Recordemos que este último es un electrodoméstico común que se usa casi todos los días, si no es que todos, pero acordarte de limpiar estas partes clave es algo que siempre debes hacer:
- Arriba: Puede que no seas lo suficientemente alto(a) como para ver por encima del refrigerador, que es donde se acumula el polvo, así que es comprensible que olvides limpiar esta zona, pero no lo hagas.
- Interior: Es difícil mantener el interior del refrigerador reluciente si gotean salsas, se filtran residuos de comida y se echan a perder los productos. Es más fácil limpiar cualquier suciedad antes de que la comida se asiente, pero incluso así no debería ser un problema con un paño húmedo y un poco de agua jabonosa.
- Detrás: Si tu refrigerador es móvil, las pelusas pueden acumularse en el suelo detrás de él. Algunos accesorios de aspiradora pueden ayudar en esta zona de difícil acceso, para así evitar el esfuerzo físico.
- Serpentín: Primero, desenchufa el refrigerador y, si puedes hacerlo sin peligro, aléjalo de la pared para acceder al serpentín. Este puede acumular polvo y residuos, lo que puede representar un peligro de incendio, de ahí la importancia de dedicar unos minutos a limpiarlos con cuidado o aspirarlos.
Fuente: Healthline
