vacunas-ILa introducción de las vacunas en el mundo de la medicina se ha traducido en grandes beneficios para la humanidad durante gran parte del siglo XX y en lo que llevamos del siglo XXI, sin embargo han existido ciertos mitos sobre las vacunas que necesitan ser desmentidos, uno de ellos es la relación entre el autismo y la vacunación.

Según los gráficos del Battling Infectious Diseases in the 20th Century: The Impact of Vaccines en los Estados Unidos los casos de enfermedades como sarampión, hepatitis A, paperas, polio, rubeola, viruela y tosferina literalmente se desplomaron una vez que fueron introducidas las vacunas como parte de un plan integral de salud infantil.

Sin embargo, la existencia de un movimiento muy polémico que se opone a la aplicación de vacunas como un plan de salud pública ha empezado a tomar peso en la sociedad y ha provocado que los índices de personas vacunadas estén bajando oponiéndose así al consenso científico probado y comprobado de que las vacunas han salvado y siguen salvando vidas.

Esta desinformación ha provocado que se estén dando brotes de enfermedades como el sarampión en lugares en los que no se habían presentado casos en varios años como el caso del estado de California en la Unión Americana que tiene un brote de sarampión (no se habían presentado casos de sarampión en ese estado en 15 años, los infectados suman a la fecha 123 casos) que se dio en un famoso parque de diversiones o la reciente muerte de un bebé por sarampión en Berlín, que ha puesto en alerta a las autoridades alemanas.

El movimiento que se opone a las vacunas toma como base el estudio del británico Andrew Wakefield, investigación que ha sido desacreditada por haber sido un fraude, de hecho Wakefield perdió procesos judiciales en su país de origen y la licencia para ejercer como médico; la revista en la que fue publicada esta investigación que relacionaba el autismo con las vacunas, The Lancet, pidió disculpas públicas en 2010 y reconoció que los datos de los manuscritos fueron falsificados.

Un estudio posterior con datos de 1.3 millones de niños alrededor del mundo desmintieron la relación del autismo con la vacunación y confirmaron la seguridad de las vacunas para prevenir enfermedades que en pasado reciente eran mortales.

El conceso de los especialistas es que no existe relación alguna entre la vacunación y el trastorno del espectro autista, así como en el timerosal (conservador de las vacunas) o el mercurio y en general las vacunas no tienen asociación con el autismo.

Es importante que desde su nacimiento los niños reciban todas sus vacunas, para ello debes acudir con tu médico o a tu centro de salud más cercano. No te dejes llevar por ideas erróneas y que han sido desmentidas, una de las vacunas más importantes para una buena salud es la información.

Aquí puedes consultar el calendario de vacunación para el desarrollo óptimo de los niños y las niñas.

 

Vía: microsiervos.com