El sistema nervioso regula funciones esenciales como el movimiento, la percepción sensorial, el pensamiento y el estado de ánimo. Para mantenerse saludable, requiere nutrientes específicos que se obtienen a través de la alimentación diaria.
Nutrientes clave para el sistema nervioso
Una dieta balanceada aporta vitaminas y minerales que favorecen el funcionamiento de las neuronas y la comunicación entre ellas. Destacan:
- Vitaminas del complejo B (B1, B6, B12 y folato): necesarias para la producción de neurotransmisores y el mantenimiento de la mielina, la capa que protege las fibras nerviosas.
- Ácidos grasos omega-3: esenciales para la estructura de las membranas neuronales y la plasticidad cerebral.
- Magnesio: regula la transmisión nerviosa y ayuda a prevenir espasmos y calambres.
- Antioxidantes como la vitamina E y la vitamina C: protegen a las neuronas del daño oxidativo, que se asocia con enfermedades neurodegenerativas.
Alimentos que benefician al sistema nervioso
Para cuidar este sistema, conviene incluir:
- Pescados grasos, como salmón y sardinas.
- Frutos secos y semillas.
- Verduras de hoja verde.
- Huevos y productos lácteos.
- Legumbres y cereales integrales.
Estos alimentos proporcionan una combinación adecuada de nutrientes que favorecen la función cognitiva, el estado de ánimo y la respuesta al estrés.
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Dieta y salud mental
Lo que comemos también influye en el equilibrio emocional. Una dieta rica en azúcares y ultraprocesados se ha asociado con mayor riesgo de ansiedad y depresión, mientras que una alimentación variada y rica en nutrientes puede mejorar el estado de ánimo y la estabilidad emocional.
Una nutrición adecuada es un pilar fundamental para el bienestar del sistema nervioso. Cuidar lo que comemos es una forma efectiva de proteger la mente, mejorar la concentración y fortalecer la salud mental y neurológica. ¡Mejora tu dieta y cuida tu salud!
Fuente: Harvard Health Publishing