Si quiere que su bebé tenga un mejor desempeño en el ámbito académico y laboral cuando alcance la mayoría de edad, entonces no debería de dudar en darle leche materna, ya que ahora científicos brasileños recién confirmaron la existencia de un vínculo a largo plazo entre la lactancia y la inteligencia. Por ello, los investigadores recomendaron a las madres amamantar a sus pequeños, a fin de que desarrollen un coeficiente intelectual (CI) más alto al llegar a la vida adulta.
Una gran cantidad de estudios han demostrado que la lactancia brinda claros beneficios a corto plazo, pero ninguno había hallado efectos futuros de esta práctica hasta el día de hoy. Este grupo de investigadores sudamericanos realizó un estudio a largo plazo para comprender la relación entre amamantar y el CI en la adultez.
Para llevarlo a cabo, dieron seguimiento a casos de 3,500 bebés (actualmente adultos) con muy diversos antecedentes en la ciudad de Pelotas, al sur de Brasil. Primero capturaron toda la información relativa a su dieta como bebés, si fueron amamantados y durante cuánto tiempo. Posteriormente, los especialistas estudiaron el CI de los participantes, su nivel educativo y su ingreso a los 30 años de edad.
El equipo de expertos, a cargo del Dr. Bernardo Lessa Horta, investigador de la Universidad Federal de Pelotas, encontró que los bebés que fueron amamantados por seis meses o más obtuvieron puntuaciones más altas en las pruebas de CI en la adultez.
El descubrimiento, publicado en la revista The Lancet, confirma que la leche materna es el mejor alimento para los bebés, pues no solo otorga beneficios previamente comprobados para la salud física, sino también para estimular el desarrollo del intelecto.
Los investigadores estiman que existe una diversidad de factores ajenos a la lactancia materna que podrían tener un impacto sobre la inteligencia, situación que llevó a los científicos a tratar de descartar causas relevantes como la educación de la madre, el ingreso familiar y el peso al nacer.
Lessa Horta comentó que su estudio ofrece una visión única ya que la lactancia materna es algo que se mantiene uniforme a través de todas las clases sociales. Detalló que la mayoría de los bebés, independientemente de su nivel socioecónomico, fueron amamantados; algunos por menos de un mes y otros por más de un año.
Agregó que los niños que fueron amamantados por periodos más largos, lograron resultados más satisfactorios en las pruebas de inteligencia una vez que se convirtieron en adultos, lo que podría traducirse en que tendrán mayores posibilidades de obtener salarios elevados y de haber completado un grado más alto de escolaridad
Los especialistas creen que la leche materna brinda una ventaja, pues es una buena fuente de ácidos grasos saturados de cadena larga, los cuales son esenciales para el adecuado desarrollo cerebral.
Vía: Notimex
