lactanciaAdemás de generar un vínculo afectivo entre madre e hijo, la lactancia materna cuenta con numerosos beneficios, como reducir el riesgo de padecer obesidad, la prevención de alergias y la disminución infecciones de oído —así como de garganta, senos paranasales y neumonías—.

Un estudio realizado en Estados Unidos reveló que alrededor del 46% de los bebés sufre al menos una infección de oído al cumplir su primer año, convirtiéndose en la principal causa de consultas por enfermedades infantiles.

De acuerdo a la investigación, los bebés que fueron amamantados, y recibieron las vacunas adecuadas, resultaron mucho menos propensos a tener infecciones de los oídos, senos paranasales, pulmones y sangre.

Tasnee Chonmaitree, especialista de la Universidad de Texas Medical Branch, aseveró que este par de medidas ayudan a reducir las probabilidades de infecciones del oído, aunque no siempre se pueden evitar debido a que son una complicación del resfriado común.

«A menudo, el resfriado común conduce a infecciones del oído bacterianas y virales, por lo tanto, son todavía comunes, aunque la incidencia es baja», agregó.

Durante el periodo de estudio, en el que se vigiló a más de 300 niños durante su primer año de vida, se descubrió que la lactancia materna y el retraso de la alimentación con fórmula reducen significativamente el riesgo de padecer infecciones del tracto respiratorio superior.

Especialistas recomiendan que las madres amamanten mínimo por seis meses. Esta acción ayudará a estimular el sistema inmunológico de los niños, al proporcionar anticuerpos y globulinas que combaten los gérmenes.

Asimismo, Chonmaitree indicó que la disminución de la exposición al humo de cigarrillo reduce, en gran medida, la irritación del revestimiento de la membrana mucosa de la nariz y la trompa de Eustaquio, lo que hace más difícil el desarrollo de gérmenes en el oído medio.

Vía: Reuters Health