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anemona-iCientíficos mexicanos descubrieron más de diez compuestos provenientes de una anémona marina, abundante en el mar Caribe, que inhiben el crecimiento de tumores, por lo que algunos podrían convertirse en fármacos contra el cáncer.

“Algunos polipéptidos de las anémonas de la especie Bunodeopsis globulifera han actuado directamente contra células tumorales, sin afectar a las sanas”, reveló Judith Sánchez Rodríguez, investigadora de la Unidad Académica Sistemas Arrecifales Puerto Morelos, del Instituto de Ciencias del Mar y Limnología de la UNAM.

Los compuestos orgánicos llamados polipéptidos, que tienen propiedades benéficas a la salud, son unas moléculas que en grandes cantidades forman proteínas.

En esta especie de anémona, que mide entre cinco y 20 milímetros, la especialista y su equipo de trabajo han identificado cerca de 70 compuestos químicos de los cuales entre 10 y 15 interfieren con el crecimiento de tumores.

La también oceanóloga y doctora en ciencias naturales Judith Sánchez, aseguró que el trabajo es complicado ya que “muchos están combinados, así que buena parte del trabajo consiste en aislarlos, caracterizarlos y, al mismo tiempo, medir su actividad”.

De todos los compuestos, la especialista detalló que en algunos han encontrado actividad antitumoral de suma importancia y en otros antimicrobiana, antiparasitaria y de sensibilidad a células beta, que pueden servir como promotores para la liberación de insulina, lo que no sólo en un futuro podría beneficiar a pacientes con cáncer, sino con diabetes u otras enfermedades.

Este trabajo de investigación lleva tres años, y ahora con este descubrimiento los especialistas mexicanos probarán estos compuestos en fases más avanzadas, “donde buscaremos hacer la síntesis de los compuestos (reproducirlos de forma científicamente asistida), porque definitivamente no se pueden extraer directamente y acabar con el recurso natural”, explicó Sánchez Rodríguez.

Los investigadores aclararon que con estos compuestos se pueden generar medicamentos que beneficien principalmente a pacientes con cáncer, aunque para que un medicamento pueda salir al mercado tiene que pasar por pruebas estrictas, primero celulares, luego con mamíferos pequeños y grandes y realizarse pruebas clínicas de diferentes fases.

De igual forma, los científicos adelantaron que también realizan trabajos con la anémona Aiptasia pallida que tiene diversos compuestos que promueven la liberación de insulina, algo muy prometedor para desarrollar un futuro medicamento para tratar la diabetes.

“Este estudio lo realizamos en colaboración con la investigadora Marcia Hiriart y su grupo de investigación, del Instituto de Fisiología Celular y observamos la selectividad que tienen varios compuestos para liberar insulina”, concluyó Judith Sánchez.

Vía: UNAM