Ciertos biomarcadores en los espermatozoides pueden ayudar a identificar a los hombres en riesgo de tener hijos con autismo, así lo señala una investigación publicada en la revista Clinical Epigenetics.

Para el estudio, los autores examinaron la epigenética de los espermatozoides, los procesos moleculares que afectan la expresión genética, en 13 hombres que tuvieron hijos con autismo y 13 que tuvieron hijos sin el trastorno.

Los investigadores se centraron específicamente en la metilación del ADN, una modificación química que puede activar o desactivar genes.

«Ahora podemos potencialmente usar esto para evaluar si un hombre va a transmitir el autismo a sus hijos», indicó Michael Skinner, profesor de ciencias biológicas en la Universidad Estatal de Washington.

«También es un paso importante hacia la identificación de los factores que podrían promover el autismo», añadió.

El estudio encontró 805 regiones de metilación del ADN distintas que podrían ser biomarcadores epigenéticos, lo que indica que los hombres tienen más probabilidades de tener hijos con autismo.

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Para probar sus resultados respecto a estos biomarcadores, los autores utilizaron muestras de esperma de 18 hombres para ver si podían identificar a aquellos con y sin niños con autismo. Los resultados fueron 90% precisos, según el trabajo.

Sin embargo, Skinner y sus colegas dijeron que deben realizarse más investigaciones antes de que este enfoque se pueda utilizar en la práctica clínica. Por ahora, el equipo está trabajando en un estudio más amplio que involucra a 100 hombres.

«Hace años descubrimos que los factores ambientales pueden alterar la línea germinal, y el esperma o el óvulo, la epigenética», aseveró Skinner. «Con esta herramienta podríamos realizar estudios poblacionales más amplios para ver qué tipos de factores ambientales pueden ocasionar este tipo de cambios epigenéticos».

En 1975, se diagnosticó autismo en una de cada 5,000 personas en Estados Unidos. A partir de 2020, una de cada 54 personas en dicho país padece el trastorno, de acuerdo con datos de los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades (CDC). El diagnóstico y tener una mayor conciencia explican parte de ese fuerte aumento, pero muchos investigadores creen que los factores ambientales y moleculares también han jugado un papel importante.

Investigaciones anteriores han demostrado que los niños pueden heredar el trastorno de sus padres y que los padres tienen más probabilidades que las madres de transmitir el autismo a sus hijos, finalizaron los investigadores.

 

Vía: Health Day News