Las personas con diabetes, u otras afecciones crónicas, piensan que el ejercicio es una mala idea, pero no es así. Si bien es importante ejercitarse bajo la supervisión y orientación de un especialista en salud, es decir, siguiendo las recomendaciones específicas de un experto, realizar actividad física trae más beneficios que efectos negativos.

En el caso de las personas con diabetes, existe el riesgo de hipoglucémia (rangos menores a 70mg/dl2). Aunque no siempre presenta síntomas, puede suceder hasta 24 horas después de haber hecho ejercicio. Para evitar éste y otros problemas, te recomendamos seguir estos consejos.

1. Mide tus niveles de glucosa antes, durante y después de realizar ejercicio. Si tus niveles de glucosa son menores a 100mg/dl, ingiere alguna fuente de carbohidratos; si están entre 100 y 150 mg/dl, realiza ejercicio con confianza; en caso de estar arriba de 200mg/dl, evita cualquier tipo de actividad y toma acciones inmediatas.

2. Suministra la cantidad correcta de insulina. En algunos casos, los médicos recomiendan ajustar las dosis de insulina antes de hacer ejercicio o deportes. Pregunta a detalle cuál es el ajuste que necesitas y aplica tu insulina en una zona donde no interfiera con la actividad que estás por realizar.

Conoce más: ¿Cómo prevenir la hipoglucemia al hacer ejercicio?

3. Cuida tu alimentación. Sólo un nutriólogo puede ayudarte a crear un plan alimenticio que te dé la energía suficiente para hacer deporte. Éste podría incluir colaciones antes y después de realizar cualquier actividad.

4. Conócete. Sólo tú puedes saber si te sientes bien o mal, para así tomar decisiones adecuadas y responsables. Recuerda que cada organismo reacciona diferente, no descuides tus niveles de glucosa y recurre al automonitoreo.

5. Carga insumos básicos. No sólo es necesario cargar con tus colaciones, también debes tener contigo un glucómetro. Éste te ayudará a saber cómo está reaccionando tu organismo (especialmente si no sueles presentar síntomas).

Vivir con diabetes y hacer deporte es posible. Utiliza las herramientas adecuadas y actívate sin riesgos. No olvides consultar a tu médico antes de modificar tu rutina de entrenamiento.

 

Vía: Notimex