Los escorpiones, o alacranes como solemos llamarlos en México, son animales arácnidos que generalmente se esconden durante el día y se mantienen activos durante la noche.
De acuerdo con los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades de Estados Unidos (CDC), los alacranes pueden esconderse debajo de rocas, madera o cualquier otra cosa que se encuentre en el suelo. Algunas especies también pueden excavar en el suelo y enterrarse. La mayoría de los escorpiones viven en áreas secas y desérticas, pero algunas especies pueden encontrarse en pastizales, bosques y en el interior de algunas cuevas.
En nuestro país, se distribuyen principalmente en la vertiente del Océano Pacífico. Entre los estados con mayor presencia de alacranes se encuentran Sonora, Jalisco, Morelos, Guerrero, Nayarit, Guanajuato y Oaxaca, por mencionar algunos.
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Síntomas de picadura de alacrán
Los síntomas de una picadura de escorpión suelen incluir los siguientes:
- Una sensación de escozor o ardor en el lugar de la picadura (muy poca hinchazón o inflamación)
- Prueba de toque positiva (es decir, dolor extremo cuando se golpea con el dedo el sitio de la picadura)
- Inquietud o sentirse ansioso(a)
- Convulsiones
- Ojos que se mueven de un lado a otro
- Caminar con falta de estabilidad y de equilibrio
- Sensación de lengua gruesa
- Hablar arrastrando las palabras
- Babear
- Espasmos musculares
- Calambres y dolores abdominales
- Depresión respiratoria (ventilación reducida que evita un adecuado intercambio de gases en los pulmones)
Dichos síntomas generalmente desaparecen dentro de las 48 horas posteriores a su aparición, aunque las picaduras del llamado «escorpión de corteza» pueden poner en peligro la vida, pues su veneno es altamente tóxico para los seres humanos.
Primeros auxilios
Debes seguir los siguientes pasos si tú o una persona a la que puedas auxiliar son picados por un alacrán:
- Comunícate con un proveedor de atención médica calificado o llama una unidad de control de envenenamiento para obtener consejos e instrucciones médicas.
- Se puede aplicar hielo directamente en el sitio de la picadura (nunca sumerjas la extremidad afectada en agua helada).
- Tú o la persona que recibió la picadura deben estar relajados y tranquilos.
- No tomes ningún analgésico o sedante.
- Si te es posible, captura al alacrán de manera segura para identificarlo.
Fuente: Centros para el Control y Prevención de Enfermedades de Estados Unidos (CDC)
