En México, las olas de calor se han vuelto cada vez más frecuentes. A decir de especialistas, una ola de calor es un fenómeno climático extremo, un episodio de temperaturas anormalmente altas que se mantienen durante varios días o semanas en una región o un país. 

Una preocupación constante durante estos episodios es el golpe de calor, un riesgo para la salud que puede afectar a la población debido a la exposición prolongada a altas temperaturas ambientales. Este fenómeno se caracteriza por un rápido incremento en la temperatura corporal, lo que puede derivar en complicaciones graves si no se toman las medidas preventivas adecuadas.

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Los grupos más vulnerables a sufrir un golpe de calor incluyen a las personas mayores de 60 años, los niños menores de cinco años, los turistas que viajan de zonas frías a lugares más cálidos, aquellos con discapacidades físicas o mentales, los enfermos crónicos y los pacientes cardíacos.

Los signos de alarma de un golpe de calor incluyen piel caliente y seca, confusión o pérdida del conocimiento, vómitos frecuentes, falta de aire o dificultad para respirar. Es fundamental estar atentos a estos síntomas y actuar rápidamente si se presentan.

Para prevenir el golpe de calor, la Secretaría de Salud y otras instituciones de salud pública recomiendan una serie de medidas preventivas:

  1. Evita realizar ejercicio o actividad intensa al aire libre entre las 11:00 y las 15:00 horas, cuando las temperaturas suelen ser más altas.
  2. Limita el tiempo que los adultos mayores pasan en exteriores para evitar la exposición al calor extremo.
  3. Evita realizar deporte o caminatas extremas estando solo. Siempre es recomendable hacerlo con compañía.
  4. Bebe muchos líquidos, al menos 2 litros de agua al día, incluso si no sientes sed.
  5. Viste ropa ligera, clara y de algodón que permita la transpiración.
  6. Aclimátate gradualmente al calor, permitiendo que el cuerpo se adapte a los cambios de temperatura.
  7. Consume alimentos ligeros y frescos, como ensaladas, frutas y verduras crudas.
  8. Evita permanecer en vehículos estacionados o cerrados durante períodos prolongados.
  9. Protégete contra las quemaduras por el sol, puedes usar un sombrero de ala ancha y gafas de sol. No olvides utilizar un protector solar de amplio espectro.
  10. Toma precauciones si tomas medicamentos o tienes una afección que aumenta el riesgo de padecer problemas relacionados con el calor. 

Ante la presencia de síntomas de golpe de calor, actúa rápidamente para evitar complicaciones graves. Se recomienda llevar al paciente a un lugar fresco, quitarle la ropa y colocarle los pies en alto. Llama a urgencias y sigue las instrucciones del personal médico.

 

Fuente: Secretaría de Salud