Dislexia y vista.2Un nuevo estudio publicado en la edición en línea de la revista Pediatrics afirma que el entrenamiento ocular y otras terapias visuales no funcionan como tratamientos contra la dislexia infantil, pues sus resultados constataron la presencia de una visión normal en la mayoría de los niños que sufrían dicho trastorno del aprendizaje.

Los hallazgos confirman lo que los médicos de la vista saben desde hace muchos años: «La dislexia es una disfunción del cerebro, no un trastorno de los ojos […] No hay estudios que identifiquen con claridad que el entrenamiento visual pueda resultar útil para el paciente disléxico«, subrayó Mark Fromer, oftalmólogo del Hospital Lenox Hill, en Nueva York, EU y quien fue ajeno al estudio.

Los investigadores evaluaron a más de 5,800 niños entre los 7 y 9 años de edad sobre diversos problemas visuales, que incluyeron ojo vago, miopía, hipermetropía, visión doble y dificultades para enfocar.

Tres por ciento de los niños con dislexia que tenían dificultades graves para leer mostraron pocas diferencias en su vista, comparados con aquellos que no padecían el trastorno. Asimismo, 80 por ciento de los niños con dislexia registraron una visión y función ocular completamente normales en todas las pruebas realizadas.

Un porcentaje ligeramente más elevado de niños con dislexia mostró visión doble o problemas para percibir la profundidad, pero no hubo evidencia de que esto se relacionara con su discapacidad para leer. Dicho hallazgo posiblemente se debió al azar.

Los resultados del estudio no son nuevos, pero involucró una revisión mucho más grande que las concretadas previamente.

Lo más importante de esto es que los padres de los niños con dislexia no deben desperdiciar mucho dinero en entrenamiento visual para sus hijos, pues no funciona, apuntó Fromer.

La Dra. Cathy Williams, coautora del estudio y profesora principal de desarrollo visual infantil en la Universidad de Bristol, Inglaterra, dijo que la investigación amplía la evidencia sobre la dislexia y la forma de tratarla.

Por su parte, el Dr. Walter Fierson, oftalmólogo pediátrico y coautor de la declaración de política sobre las discapacidades del aprendizaje de la Academia Americana de Pediatría, comentó que la investigación reiteró que la causa de la dislexia está vinculada con la forma en la que se procesan las letras y los sonidos, mas no con la forma en la que se perciben las letras y las palabras en primer lugar.

Señaló que es importante una evaluación ocular inicial para averiguar si existen problemas de la visión, pero solo debe hacerse para descartar enfermedades o tratar padecimientos específicos, y para recetar lentes graduados o lentes de contacto para la miopía o la hipermetropía.

«Hasta ahora, las mejores técnicas para remediar la dislexia tienen que ver con una enseñanza intensiva individual (o al menos en pequeños grupos) de métodos fonéticos, por parte de maestros experimentados«, enfatizó Fierson.

El experto agregó que es muy importante una evaluación inicial por parte de un neuropsicólogo o psicólogo educativo para determinar las áreas problemáticas específicas que tiene un mal lector.

«Los padres deben evitar las curas rápidas no comprobadas y recurrir a la fonética intensiva […] Como usualmente pasa, las cosas que parecen demasiado buenas para ser ciertas generalmente no lo son. Eso incluye los tratamientos de la vista para la dislexia«, concluyó Fierson.

 

Vía: HealthDay News