A muchos padres les gusta compartir su habitación con los pequeños de la casa, en especial cuando tienen poco tiempo de nacidos. Si bien ayuda a los bebés a dormir más durante la noche —y fomenta la lactancia materna—, existe el riesgo latente de síndrome de muerte súbita del lactante.
Para evitar los riesgos de compartir la cama, mientras disfrutan de los beneficios de compartir la habitación, los padres tienen muchas opciones. Es importante mantener a tu pequeño cerca, pero no en tu cama.
- Coloca una cuna junto a tu cama. Esto te permitirá mantener la cercanía deseada, lo que puede ser especialmente importante si estás amamantando.
- Considera el uso de una cama extra para permitir que tú y tu bebé estén uno al lado del otro, pero en una superficie separada.
¿Cómo compartir la cama de la manera más segura posible?
A pesar de los riesgos de compartir la cama, algunos padres deciden que es el mejor para su familia. Si decides compartir tu cama con tu bebé, sigue estas precauciones:
- No compartas la cama con un bebé menor de 4 meses de edad.
- Coloca a tu bebé boca arriba para dormir, con el fin de reducir el riesgo de SIDS.
- Viste a tu bebé con ropa mínima para evitar el sobrecalentamiento.
- No coloques a tu bebé sobre una superficie blanda, como un colchón blando, un sofá o una cama de agua.
- Asegúrate de que tu colchón encaje perfectamente en el marco de la cama para que tu bebé no quede atrapado entre el marco y el colchón.
- No cubras la cabeza del pequeño mientras duerme.
- No uses almohadas, edredones u otros artículos suaves o lujosos en la cama.
- No bebas alcohol ni uses medicamentos que podrían impedirte despertarte.
- No coloques tu cama cerca de cortinas o persianas.
- No te duermas con un bebé en el pecho.
Vía: Kids Health
