La Sociedad Estadounidense del Cáncer (ACS, por sus siglas en inglés) afirma que estar en remisión se refiere a un momento en donde el tratamiento para el cáncer está funcionando y mantiene la enfermedad bajo control. La remisión puede durar desde semanas hasta años, ya sea durante o después del tratamiento.

De acuerdo con el Instituto Nacional del Cáncer de Estados Unidos (NCI), una persona debe tener una reducción en el número o la gravedad de sus síntomas para poder afirmar que se encuentra en remisión.

Cabe mencionar que entrar en remisión no significa que una persona se haya curado del cáncer. Si la enfermedad de una persona se cura, significa que no quedan rastros de la misma en el cuerpo y que no volverá. Debido a que las células cancerosas todavía pueden existir en el cuerpo, existe la posibilidad de que cáncer reaparezca o regrese.

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Existen dos tipos de remisión del cáncer: remisión parcial y remisión completa.

La remisión parcial significa que el cáncer ha respondido positivamente al tratamiento y se ha reducido de forma considerable. Aunque esto puede significar que una persona ha reducido los síntomas de la enfermedad, el cáncer en sí no ha desaparecido por completo.

La remisión completa significa que todos los signos, síntomas y rastros de células cancerosas ya no están presentes. Después de 5 años de remisión completa, algunos médicos pueden decir que una persona está curada.

RECUERDA: Estar en remisión completa no significa necesariamente que el cáncer haya desaparecido por completo, ya que puede reaparecer años después. No obstante, incluso si la enfermedad regresa después de la remisión completa, una nueva ronda de tratamiento podría hacer que el cáncer vuelva a entrar en remisión.

 

Fuente: Medical News Today