No, la insulina bien aplicada no arde; sin embargo, existen algunas causas que pueden provocar molestias o ardor. En su mayoría, se trata de fallas en la técnica de aplicación.
¿Por qué puede arder la insulina?
Un error común es aplicarla inmediatamente después de sacarla del refrigerador. Ciertamente, es necesario refrigerar la insulina en frasco —para que se conserve en buen estado—, pero si se aplica fría, es probable que arda. Para evitarlo, saca el frasco 15 minutos antes de aplicarla, con el fin de que esté a temperatura ambiente. De esta manera, evitarás las molestias y el ardor.
Si vas a guardar la insulina en el refrigerador, considera que debe estar lo más alejada posible del congelador. Si la insulina se congela, puede dejar de servir; si está muy fría, puede lastimar.
Otro error común es limpiar con alcohol la zona que se va a inyectar y no esperar a que éste se seque. Si el alcohol está fresco y se realiza la punción, puede entrar en la piel y ocasionar ardor. Utiliza una cantidad moderada de alcohol para limpiar tu piel y espera 30 segundos a que se seque. Recuerda, si tu piel está limpia o te acabas de bañar, no es necesario que utilices alcohol.
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Tip de diabetes
Como dato extra, recuerda que la insulina sólo dura 30 días una vez que la abres, ya sea en pluma o en frasco. Después de ese tiempo, debes desecharla, de lo contrario, se diluye su efecto.
Vía: Lizeth Gómez Munguía, nutrióloga y educadora en diabetes
