La cafeína es un estimulante que se encuentra naturalmente en algunos alimentos y, mediante procesos industriales, se añade a otros.

Esta puede desencadenar un latido cardíaco acelerado, dolor de cabeza, problemas digestivos, presión arterial alta, mal humor e insomnio, así lo advierte el Consejo Nacional de Seguridad de Estados Unidos.

Los niños pueden terminar sintiendo más los efectos de la cafeína que los adultos, ya que ellos no la consumen en tanta cantidad y sus cuerpos no han acumulado la misma tolerancia que las personas adultas.

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Por ello, te mencionamos 3 cosas que la cafeína no hace por los niños, cortesía del consejo:

  1. Calmar la sed. De hecho, la cafeína es un diurético y hará que quienes la consuman orinen más sin rehidratarse.
  2. Brindar la nutrición que requieren. Existe alguna evidencia de que la cafeína afecta la forma en que se absorbe el calcio, lo que puede conducir a problemas óseos acelerados en los menores.
  3. Aportar energía real. La cafeína puede hacer que el niño se sienta más despierto, pero sin que reciba energía real, advierte la agencia. De hecho, puede provocar insomnio y hacer que la persona se sienta más cansada al día siguiente. Por ello, los niños deben obtener energía al comer alimentos nutritivos, subraya el consejo.

Si quieres conocer más maneras en las que la cafeína puede afectar a los niños, consulta a tu médico y aun especialista en nutrición.

 

Vía: Health Day News