El pan germinado se elabora con granos integrales que se remojan hasta que empiezan a germinar. Los granos integrales contienen todas las partes del grano (salvado, endospermo y germen), lo que los hace más ricos en fibra, antioxidantes y otros nutrientes que los granos refinados.
Los beneficios del proceso de germinación incluyen:
- Aumenta la absorción de nutrientes como el hierro y el zinc, a la vez que reduce el ácido fítico (un antinutriente).
- Reduce parte del almidón, lo que resulta en un contenido de carbohidratos ligeramente menor que otros tipos de pan.
- Descompone parte del gluten, haciéndolo más tolerable para personas con sensibilidad al gluten no celíaca (una sensibilidad al gluten que no es tan grave como la de la enfermedad celíaca, catalogada como una enfermedad autoinmune). No obstante, procura evitar el trigo germinado y otros granos que contengan gluten si padeces enfermedad celíaca o alergia al gluten.
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Una rebanada de pan germinado contiene:
- Calorías: 715
- Proteínas: 5 gramos (g)
- Grasas: 0 g
- Carbohidratos: 12.9 g
- Fibra: 2 g
La mayoría de los panes de grano germinado se pueden encontrar en la sección de panadería de los supermercados.
Fuente: Very Well Health