Lejos de lo que mucha gente pudiera imaginar, las alergias son una afección bastante común. Y aunque la mayoría no representa una seria amenaza para la salud integral, sí pueden llegar a afectar la calidad de vida de una persona.

Comúnmente, las alergias suelen potenciarse en primavera, debido al polen y otros alérgenos que circulan por el aire. Sin embargo, las oficinas también son un ambiente donde se pueden encontrar alérgenos, provocando que algunos trabajadores se vean afectados para desarrollar de forma adecuada sus labores.

Si bien es cierto que los ambientes cerrados y climatizados reducen los síntomas en las personas que padecen alergias a inhalantes como el polen de los pastos y de las flores, no sucede así con las personas que son alérgicas al polvo y a los ácaros.

Además, en una oficina suelen haber factores que contribuyen a agravar las alergias respiratorias en ambientes cerrados, como el olor a pintura, a desinfectantes, perfumes fuertes y olores emanados de construcciones cercanas.

Por ello, las oficinas pueden ser un ambiente nocivo para las personas que padecen rinitis alérgica o asma bronquial, a pesar de que se realice limpieza diaria.

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Se puede encontrar alérgenos en grandes cantidades en los ventiladores, las rendijas del aparato del aire acondicionado, en los escritorios, los cajones, las bibliotecas y sobre todo en los expedientes y libros viejos. Siendo el agente más nocivo en un ambiente cerrado el humo de cigarro.

Incluso, expertos señalan que existe un tipo de alergia respiratoria que ocurre en ambientes cerrados de grandes edificios, este se denomina ‘síndrome alérgico de la oficina’. Es causado por la exposición a químicos usados en la construcción, además de las impurezas contenidas en los tubos del aire acondicionado.

¿Cómo se pueden evitar o prevenir las alergias en una oficina?

Los especialistas recomiendan que llevar a cabo algunas medidas resulta eficaz para lograr este objetivo, entre las más aconsejadas se encuentran:

1 Verificar la correcta circulación del aire.

2 Realizar limpieza profunda de forma frecuente.

3 Estar pendiente de darle mantenimiento al aire acondicionado.

4 Evitar espacios con humedad (de esta forma se impedirá la creación de hongos y bacterias).

5 En caso de que alguna persona esté resfriada, pedirle que utilice cubre bocas.

 

Vía: ABC, Notimex