Las vacunas no son sólo para los niños. La protección de algunas vacunas infantiles puede desaparecer con el tiempo y también puedes estar en riesgo de contraer una enfermedad prevenible por vacunación debido a tu edad, trabajo, estilo de vida, viajes o condiciones de salud.

Todos los adultos necesitan inmunizaciones para ayudarles a prevenir la transmisión y propagación de enfermedades graves que podrían resultar en mala salud, falta de trabajo, facturas médicas y no poder cuidar a la familia.

Asimismo, ciertas condiciones médicas debilitan el sistema inmune, por lo que personas con estas afecciones podrían estar en mayor riesgo de presentar complicaciones serias comparadas con personas sanas; es el ejemplo de la población con diabetes, infección por Virus de Inmunodeficiencia Humana (VIH), enfermedad cardiovascular, asplenia (personas sin bazo), etc.

Es importante que si presentas alguna de estas enfermedades acudas a tu doctor para platicar sobre las diferentes opciones que existen, ya que algunas de estas vacunas no se encuentran en el esquema de vacunación habitual del adulto. A continuación se resumen las distintas condiciones de salud en las que se recomienda un esquema de vacunación específico: