En muchos casos la epilepsia es una afección de por vida. Estos casos requieren de un tratamiento con fármacos anticonvulsivos. Si bien existe un riesgo muy bajo de muerte súbita con la epilepsia y cuando se diagnostica y trata a tiempo se puede dar a los pacientes una vida casi normal, existen algunas complicaciones cuando no se atiende o no se actúa de manera correcta durante una crisis.

Las posibles complicaciones incluyen:

  • Problemas de aprendizaje.
  • Riesgo de neumonía por aspiración, casuada por broncoaspiración de alimento o saliva durante una convulsión.
  • Lesiones provocadas por golpes, caídas, mordidas autoinflingidas, o por encontrarse operando maquinaria o un vehículo cuando se presenta una convulsión.
  • Lesiones cerebrales permanentes, por ejemplo accidente cerebrovascular u otro daño.
  • Efectos secundarios de medicamentos.