Según los médicos, el estrabismo es una condición en la que ambos ojos no miran al mismo lugar al mismo tiempo. Puede presentarse como una desviación de un ojo hacia adentro (esotropía), hacia afuera (exotropía), hacia arriba (hipertropía) o hacia abajo (hipotropía). Dicha desalineación suele deberse a incongruencias, como la incapacidad del ojo para enfocar correctamente un punto lejano.

El estrabismo se presenta con mayor frecuencia en bebés y niños pequeños debido a factores hereditarios o problemas durante el desarrollo físico. La mayoría de los casos en menores de edad se deben a una mala comunicación entre el cerebro, los músculos y los nervios oculares. No obstante, también puede presentarse en adultos que han sufrido un derrame cerebral, un traumatismo craneoencefálico o diabetes.

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Los tratamientos van desde lentes graduados hasta cirugía para alinear los ojos. No obstante, muchos programas de terapia visual ahora también incorporan ejercicios para los ojos. Estos pueden ayudar a mejorar la coordinación.

Los ejercicios no deben considerarse un sustituto del tratamiento médico. Debido a que las causas y manifestaciones del estrabismo varían ampliamente, los ejercicios oculares guiados por el paciente no deben considerarse por sí solos como tratamiento exclusivo. Un oftalmólogo puede evaluar adecuadamente la situación y prescribir un régimen diseñado para abordar los síntomas específicos.

Por ello y con base en la información anterior, asegúrate de hacerte un examen ocular completo antes de comenzar un plan de tratamiento para tu visión.

 

Fuente: Healthline