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Autism Speaks

Conductas desafiantes 4
Parte ll

Consideraciones conductuales

Guía para padres

ATN Red de Tratamientos del Autismo
AIRP Red e Investigación sobre la Salud Física
para la Intervención en el Autismo

Conductas desafiantes 4
Parte ll

ÍNDICE

Consideraciones conductuales

Componentes para el análisis conductual

Evaluación e intervención conductual

Otras precauciones a considerar

El sistema de comunicación funcional

La falta de auto-conciencia

Preocupaciones sensoriales

Sistemas de apoyo y medio ambiente

Recursos

Agradecimientos

Puedes verlo también en

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Consideraciones conductuales

Cuando una persona se comporta de manera difícil u ofensiva, generalmente pensamos en el impacto que tienen en nosotros las acciones de la persona. A veces nos sentimos amenazados, avergonzados o lastimados. Esto es absolutamente normal, pero no siempre ayuda. En vez de esto, podríamos pensar acerca de la conducta pero desde la perspectiva del individuo.

Cambiar nuestra mentalidad de, cómo una conducta nos afecta, a tratar de ver, qué podría estar sucediendo desde el punto de vista del individuo, es un paso importante para encontrar maneras de comprender su conducta. El entender esto permitirá el reemplazo de conductas preocupantes o desadaptativas, por habilidades funcionales.

“¿Por qué es tan espantoso para mi hijo entrar a un lugar, al punto que tiene que morderme? ¿Qué dolor está sintiendo su cuerpo y que está tratando de anular golpeándose la cabeza? ¿Es esto algo biológico sobre lo cual no tiene control? Si es así, “ ¿podemos ayudarle para que aprenda a adaptarse?

aprenda a adaptarse? Regresando a las bases de la conducta, es importante considerar su posible propósito o función. ¿Cómo le sirve esta conducta a la persona? ¿Obtiene algo con esto? ¿Consigue escaparse de algo aburrido o difícil? ¿Recibe atención? ¿Le permite asegurar un poco de control sobre su vida o alrededores? ¿Le ayuda a bloquear el dolor? ¿Qué tiene de bueno la conducta? ¿Está tratando de decirme algo?

Tomarse el tiempo para entender la función puede ser frecuentemente una ventana a la motivación detrás de la conducta. Una evaluación adecuada de la función de la conducta usualmente es esencial para elaborar una respuesta apropiada.

Por ejemplo, supón que un niño patea cada vez que es hora de ir a la clase de educación física y la respuesta a este pataleo es ponerlo en tiempo fuera. Es probable que esta intervención sea ineficiente si la razón por la que patea es evitar ir a la clase. Él consiguió lo que quería, y aprendió que patear es una manera efectiva de decirlo. La próxima vez que no quiera ir a la clase en el gimnasio, ¿qué es lo más probable que haga? Patear, ya que esto lo mantiene fuera del ruido y caos del gimnasio, lo cual él encuentra doloroso y perturbador y probablemente usará la comunicación que ha aprendido, a menos que se le enseñe una mejor manera de lidiar con la clase de educación física (por ejemplo, pedir que haga una actividad diferente) o defender que se quiere evitar una situación desagradable.

Componentes para el análisis conductual

En el campo del Análisis Conductual Aplicado, conocido como Análisis de ACC (Antecedente, Conducta, Consecuencia) los tres componentes que se documentan y consideran en un episodio conductual específico son:

·La situación, eventos y condiciones que ocurrieron antes de que la conducta comenzara (Antecedente)
·Una descripción clara de la conducta (Conducta)
·La situación y eventos que siguieron a la conducta inmediatamente después

Estas conductas pueden registrarse usando una forma como esta:

Formato ACA

Estudiante: ______________________________

Observador: _________________________

Conducta objetivo: _________________

Antecedente: El evento que ocurre inmediatamente antes de la conducta.

Conducta: La ocurrencia de la conducta problema objetivo. (registrar la frecuencia)

Consecuencia: El evento que inmediatamente sigue la ocurrencia de la conducta

Fecha Hora Antecedente Conducta Consecuencias Comentarios

Evaluación e intervención conductual

Un profesional con experiencia en la evaluación e intervención conductual (por ejemplo un BCBA) usará una variedad de herramientas para ayudar a entender la función de la conducta en algún momento dado. Es importante recordar que las escalas son herramientas, no respuestas. Una buena Evaluación de la Función de la Conducta (EFC) usará varias medidas –cuestionarios como se indican abajo, evaluaciones observacionales, escucha activa, y la experiencia del profesionista y su formación.

Una EFC debe ser amplia tomando en cuenta las observaciones de las conductas de cómo y cuándo ocurren. También debe buscar ser empática y tratar de entender por qué la persona podría sentir la necesidad de comportarse de cierta manera. Asegúrate que tu proveedor esté usando un abordaje amplio, dado que es esencial llegar a comprender las preocupaciones, causas potenciales, y posibles intervenciones y soluciones para reemplazar estas conductas por habilidades.

Los siguientes recursos te ayudarán a aprender más acerca de cómo la conducta es frecuentemente evaluada y considerada por los profesionales:

Guía del Análisis Funcional para padres Evaluación de la Función de la Conducta e Intervenciones Positivas:
Lo que los padres necesitan saber Manual Enfocando las Tres Grandes: entrenamiento para padres

Si no tiene acceso a un proveedor de apoyo conductual o equipo, puede comenzar a convertirse en un observador de los elementos de la conducta. Las herramientas de Recolección de datos de Barbara Doyle y el Diccionario de comunicación pueden ser útiles. Después de definir y evaluar las conductas, el equipo conductual, el personal de enseñanza u otros proveedores deben explicarle los resultados y desarrollar estrategias de instrucción usando Apoyos Conductuales Positivos (ACP) y estrategias de reforzamiento. El uso de Apoyos Conductuales Positivos es una manera de promover el desarrollo de habilidades funcionales y la motivación, y puede usarse en casa, escuela, trabajo y en la comunidad. Estos apoyos frecuentemente necesitan ser individualizados a las necesidades del niño, y a las funciones de sus conductas, para ser efectivos. Los apoyos basados en el salón de clase generalmente no son suficientes para conductas desafiantes, por lo que tal vez tengas que abogar para que estos apoyos sean individualizados. Más información acerca de apoyos conductuales positivos, entrenamiento y recursos para las familias, escuelas y personal, y estrategias para desarrollar conductas positivas se incluyen en el siguiente capítulo.

Para un niño en edad escolar, el distrito escolar es responsable (bajo las leyes de IDEA) de hacer la EFC y desarrollar intervenciones positivas para un niño cuya conducta inhibe su aprendizaje o el aprendizaje de los que están a su alrededor. Si no tienen un experto en su personal, necesitan conseguir este servicio a través de otras agencias o consultores. Algunas escuelas proporcionarán entrenamiento adicional e instrucción en casa o a través de otros proveedores de la comunidad.

Otras precauciones a considerar

“Si la función de la conducta es obtener aten- ción, la conducta desafiante puede reducirse si la atención e interacción ya no se le dan al individuo cuando presenta la conducta pro- blema. Esto quiere decir: no hacer contacto visual directo o llamar al individuo por su nombre, no reprender, no razonar o explicar, o mostrar que tú estás alterado. Los intentos para redirigir la conducta prestando atención pueden, de manera inadvertida, aumentar la conducta problema.’

‘Nota: El ignorar la conducta desafiante puede, inicialmente, au- mentar la misma porque es como la persona comunicaba lo que quería y lo conseguía hasta ahora. Mantén la confianza. Al final, ignorar va a reducir la probabilidad de que el individuo presente una conducta desafiante para obtener atención.”

Problemas de comunicación

Maestros, proveedores conductuales y/o terapeutas de habla y lenguaje, también deben evaluar las habili- dades de comunicación funcional que estén disponibles para el individuo, ya que esto puede ser un factor crítico. Al fin de cuentas, la conducta también es una forma de comunicación –a veces es la única manera disponible para un individuo que no ha aprendido otras habilidades.

Será de ayuda considerar: ¿Entendió lo que dije? ¿Puede de manera independiente hablar o usar otras formas de comunicación para expresar sus preocupaciones? ¿Reportar dolor? ¿Pedir? ¿Solicitar alejarse? Si no lo hace verbalmente, ¿tiene tarjetas o algún aparato que use de manera independiente para esto? Aún si puede hablar bien, ¿tiene el lenguaje o confianza para expresar sus necesidades y preocupaciones verbalmente? Si no es así, ¿es posible que esté encontrando otras maneras de expresar lo que quiere, sus frustraciones, miedos u otra información?

El sistema de comunicación funcional

Varios individuos con autismo tienen dificultad para procesar la información–escuchar todas las partes de lo que alguien dijo, relacionar lo que ven con lo que oyen, o ser capaces de decidir qué información es importante y relevante frente a todas las posibles imágenes, sonidos, olores, etcétera–. Varias personas con autismo aprenden visualmente o de alguna manera se benefician de la información presentada en dibujos, palabras o videos.

La información verbal (habla) desaparece tan pronto se dice, pero las imágenes tienen un poder de permanencia –pueden estar disponibles y accesibles por el tiempo o frecuencia que el individuo las necesite.

Es esencial que el sistema de comunicación funcional sea algo que el niño pueda iniciar y usar de manera independiente. Frecuentemente una terapeuta del habla y lenguaje puede hacer una evaluación y diseñar intervenciones adecuadas. Varios equipos especializados en intervenciones para el autismo han adquirido experiencia en el desarrollo y apoyos para la comunicación. Si se necesita apoyo y entrenamiento en comunicación funcional hay una variedad de sistemas que el equipo debe explorar, como PECS (Sistema de Intercambio Comunicativo por Imágenes) y aparatos de producción de voz, para encontrar el que mejor se adapte al individuo, a sus necesidades y preferencias específicas.

La falta de auto-conciencia

“Me acuerdo cómo se dejaba caer al suelo cuando tenía sed. La especialista del lenguaje me enseñó cómo tomar su pequeña mano, moldear sus dedos para apuntar y guiar su mano para tocar la taza. Hicimos esto cientos de veces, cambiando de la taza a los juguetes, y después, a las películas que quería ver. Cuando apuntaba, obtenía lo que quería. Empezó a apuntar. ¡Estaba aprendiendo a pedir!” TO, padre

A veces, inclusive individuos con autismo altamente funcionales pueden tener dificultades para comunicar ciertas preocupaciones. Por ejemplo, a varios individuos con Síndrome de Asperger les falta auto-conciencia. Como resultado, les es muy difícil aislar el dolor, describir emociones o identificar lo que les está causando un sentimiento negativo. La expectativa de que un alumno quien sólo obtiene calificaciones de 10 deba manejarse en situaciones sociales u otras experiencias desafiantes puede dejar a un individuo sin apoyo, y como resultado, se ponga ansioso y reactivo. La instrucción específica en conciencia social y auto-conciencia puede ser tremendamente benéfica para alguien que tiene un vocabulario increíble, pero tiene dificultad para comunicar preocupaciones socialmente relevantes.

Preocupaciones sensoriales

Los individuos con autismo frecuentemente reportan una manera diferente de experimentar el mundo, ayuda tener esto en mente cuando se estén considerando las conductas específicas de una persona. Un niño puede gritar o salir corriendo cuando se cantan Las mañanitas, no por hacerse el difícil, sino porque el canto y/o las porras que le siguen son de verdad dolorosas para él. Frecuentemente estas respuestas, son más un reflejo que una opción conductual. Cuando una persona se mantiene alejada de ciertas experiencias –sonidos, toques, olores, sabores/texturas de alimentos, cierto tipo de movimientos, etcétera, se llama evitación sensorial o defensa sensorial. Frecuentemente existe, en estos individuos, una necesidad contrastante de estimulación adicional de ciertos sentidos, como una manera de mantener la atención o conseguir un estado más tranquilo, a esto se le llama conducta de búsquedasensorial.

Es importante considerar si el individuo tiene alguna necesidad sensorial que no se ha atendido. ¿Brinca para arriba y para abajo porque se siente bien? Alternativamente, ¿hay una defensa sensorial?, ¿hay algo en la etiqueta de su playera, en la iluminación, en el sonido, en la muchedumbre, en los olores, que encuentra doloroso o agobiante?

Para investigar si los factores sensoriales pueden ser una consideración con tu ser querido, un Terapeuta Ocupacional u otro profesional de la especialidad, puede usar del Perfil Sensorial o de la Medida del Procesamiento Sensorial (MPS) una forma adecuada para su edad. Una lista de chequeo sensorial e información adicional está disponible en la página web de la Fundación del Trastorno de Procesamiento Sensorial (Sensory Processing Disorder Foundation). También puedes encontrar más información aquí.

“Tenía una fascinación con las fiestas de cumpleaños y por apagar las velitas. En algún momento teníamos que prenderlas de nuevo, cantar de nuevo, y soplar de nuevo –veinte veces o más en cada cumpleaños–. Desarrollamos un programa para enseñarle a Joey cómo terminar las fiestas de cumpleaños. Por supuesto, todo esto pasó hasta después de los cinco años, porque hasta ese momento no podía tolerar el escuchar Las mañanitas para nada.” BH, padre

Sistemas de apoyo y medio ambiente

Dinámicas de Familia, Personal y Apoyos

El cambio es difícil para cualquiera de nosotros, pero puede serlo aún más para quienes no entienden qué cambios están sucediendo y por qué. Considera factores que potencialmente contribuyan a dejar confundido o ansioso a tu ser querido con autismo.

Si las conductas desafiantes ocurren o se intensifican de repente, es im- portante preguntarse qué cambios han ocurrido en su vida. ¿Ha habido cambios en los horarios de escuela, trabajo o en el lugar de residencia? ¿Cambios en el ambiente familiar? ¿Un hermano(a) dejando la casa para ir al colegio? ¿La pérdida de un miembro de la familia? ¿Ha habido cambios en el personal? ¿Pérdida de un miembro del personal favorito? Si hay un plan conductual, ¿se está siguiendo de manera consistente? ¿Tal vez hay personal nuevo que necesita capacitación adicional o que emplea métodos estresantes? ¿Hay alguna preocupación conductual de los cuidadores? ¿Cuál es su nivel de estrés?

Recursos

Información educativa, Derechos & Políticas:

www.autismomx.org
Ley General para la Atención y Protección a Personas con Trastornos del Espectro Autista

Organizaciones nacionales:

www.autismomexico.com
Clínica Mexicana de Autismo y Alteraciones del Desarrollo A.C.
www.clima.org.mx
Asociación Mexicana para el Estudio y Tratamiento del Autismo y Otros Trastornos de Desarrollo I.A.P
www.sideso.df.gob.mx
Instituciones de Autismo en México Index
www.teletón.org
Centro de Autismo Teletón

Organizaciones internacionales en español:

www.autismo.org.es
Confederación Autismo España
www.autismoaba.org
Autismo ABA
www.aspaut.org
Asociación de Padres en Chile
www.apadea.org.ar
Asociación Argentina de Padres de Autistas
www.fespau.es
Federación Española de Autismo
www.ligautismo.org
Liga Colombiana de Autismo
www.pasoapaso.com.ve
Fundación Paso a Paso Venezuela

Nota

Estos materiales son el producto de actividades continuas de la Red de Tratamientos del Autismo, un programa financiado por Autism Speaks. Tiene apoyo a través del acuerdo de cooperación UA3 MC 11054 del Departamento de Salud y Servicios Humanos de los EEUU (U.S. Department of Health and Human Services), la Administración de Servicios y Recursos para la Salud (Health Resources and Services Administration), y el Programa de Investigación sobre la Salud Materna e Infantil del Hospital General de Massachusetts (Maternal and Child Health Research Program to the Massachusetts General Hospital).

La traducción de este material al español está autorizada por la organización Autism Speaks para ser difundido por Fundación Carlos Slim.

Agradecimientos

Esta publicación fue desarrollada por miembros de la Red de Tratamientos del Autismo/Comité de Ciencias de la Salud Conductual de la Red de Investigación sobre la Salud Física para la Intervención en el Autismo de Autism Speaks.

Agradecimientos especiales por su contribución a esta publicación a Nicole Bing, Psy.D. (Hospital Infantil de Cincinnati), Brian Freedman, Ph.D. (Universidad de Delaware), Stephen Kanne, Ph.D. (Centro Médico de la Universidad de Baylor), Rebecca Landa, Ph.D. (Instituto Kennedy Krieger), Johanna Lantz, Ph.D. (Universidad de Columbia), Donna Murray, Ph.D. (Hospital Infantil del Centro Médico de Cincinnati), y Laura Srivorakiat, M.A. (Hospital Infantil de Cincinnati).

Fue editada, diseñada y producida por el departamento de comunicaciones de la Red de Tratamientos del Autismo/Red de Investigación sobre la Salud Física para la Intervención en el Autismo de Autism Speaks. Agradecemos las revisiones y sugerencias de varias personas, incluyendo las de familias asociadas con la Red de Tratamientos del Autismo de Autism Speaks. Esta publicación puede distribuirse tal como se encuentra o de manera gratuita, puede individualizarse electrónicamente para su producción y diseminación, de modo que incluya el nombre de su organización, así como el de sus canales más frecuentes. Para la revisión de la información, por favor entre en contacto con atn@autismspeaks.org.

Estos materiales son el producto de actividades continuas de la Red de Tratamientos del Autismo, programa financiado por Autism Speaks. Tiene apoyo a través del acuerdo de cooperación UA3 MC 11054 del Departamento de Salud y Servicios Humanos de los Estados Unidos de América, (U.S. Department of Health and Human Services), la Administración de Servicios y Recursos para la Salud (Health Resources and Services Administration), y el Programa de Investigación sobre la Salud Materna e Infantil del Hospital General de Massachusetts (Maternal and Child Health Research Program to the Massachusetts General Hospital). Sus contenidos son responsabilidad única de los autores y no necesariamente representan la opinión oficial de MCHB, HRSA, HHS. Las imágenes en este material se compraron a istockphoto®. Escrito en marzo de 2012.

Este documento fue traducido al español por la Fundación Carlos Slim con autorización de Autism Speaks en 2015.

Agradecemos la colaboración del Dr. Carlos Marcin y la Dra. Patricia Sánchez Lizardi

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